Texas: Mamá tiene un parto inesperado en Walmart y recibe baby shower de los empleados

Una madre entró en labor en pleno supermercado y recibió un baby shower semanas después de los mismos empleados que la ayudaron.

Parto inesperado en Walmart: El bebé nació con solo 2 kilos y pasó más de un mes en cuidados intensivos antes de conocer su hogar.
Parto inesperado en Walmart: El bebé nació con solo 2 kilos y pasó más de un mes en cuidados intensivos antes de conocer su hogar.
Ilustración

Lo que debía ser una parada rápida en Walmart terminó en un parto de emergencia que movilizó a empleados, clientes y a una enfermera extranjera. El acto de solidaridad espontánea marcó para siempre la vida de Serena Mancera, una madre con embarazo de alto riesgo que dio a luz entre los pasillos de una tienda en Galveston, Texas.

El 13 de marzo, Serena decidió acompañar a su esposo Juan y a sus tres hijos a hacer compras, pese a las indicaciones médicas de reposo por una condición llamada placenta previa. Mientras su pareja estaba en la fila para pagar, Serena sintió un sangrado incontrolable en el baño. Al buscarla, Juan encontró a sus hijos gritando y a su esposa en pleno trabajo de parto. La reacción fue inmediata: cinco trabajadores de Walmart y una enfermera canadiense se organizaron para ayudar. Uno calmó a los niños, otro llamó a emergencias, mientras Serena era asistida en el suelo.

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Un parto en condiciones críticas

El bebé, apodado cariñosamente “JJ”, nació poco después y fue trasladado de inmediato a la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatales, donde permaneció cinco semanas. Con apenas 2 kilos de peso, su estado era delicado. Durante ese tiempo, la familia debió dividirse para atender al recién nacido y al resto de los hijos. “Fue aterrador, pero también nos mostró lo buena que puede ser la gente”, expresó Serena, agradeciendo especialmente a sus suegros, que la ayudaron a cuidar de los demás niños durante el proceso.

El baby shower más inesperado

La historia no terminó en el hospital. El 3 de mayo, Serena volvió a Walmart sin imaginar lo que le esperaba. Pensaba comprar toallitas húmedas, pero al entrar fue sorprendida con un baby shower organizado por los mismos empleados que semanas antes la habían asistido. Pañales, cochecito, abrazos y lágrimas de emoción llenaron el pasillo. “Sentí que esa gente es parte de nuestra familia”, dijo conmovida.

Hoy en día, JJ ya está en casa, ganando peso y recibiendo el amor de sus hermanos, especialmente de su hermana mayor, que lo trata como un muñeco. Juan, aún emocionado, reflexiona: “La gente de Walmart me salvó mentalmente. Gracias a ellos pude estar presente para mi esposa en el momento más difícil”.

Serena y Juan planean contarle a JJ, cuando sea mayor, cómo llegó al mundo: en un supermercado, rodeado de ayuda desinteresada, el Día de San Patricio. Una fecha que para ellos ahora simboliza no solo el nacimiento de su hijo, sino una prueba de humanidad en tiempos difíciles.

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