La vida de Stephen Murray estuvo marcada por uno de los peores desastres naturales de Estados Unidos: el devastador incendio Camp Fire que dejó 85 víctimas mortales y más de 18 000 estructuras destruidas. El desastre dejó huellas imborrables en los ciudadanos de California, para Murray fue uno perderlo absolutamente todo.
Pero su espíritu indomable no se quebró. “Perder mi hogar y ver cómo mi comunidad fue destruida fue una experiencia devastadora, pero me mostró la importancia de la solidaridad y el apoyo mutuo en tiempos de crisis”, contó el residente de California a CNN.
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Ayuda a las víctimas
Este año, el incendio Thompson estalló cerca de las carreteras Cherokee y Thompson Flat Cemetery en el condado de Butte. La ola de calor en Estados Unidos y los fuertes vientos avivaron rápidamente las llamas, llevando a la evacuación de miles de residentes y destruyendo varias estructuras.
Fue entonces que Murray decidió ayudar a sus “hermanos de California”, el hombre organizó una iniciativa para proporcionar comida y bebidas gratuitas a los evacuados. “Quiero dar un poco de esperanza y alivio a aquellos que están pasando por lo que yo viví.”, contó el ciudadano estadounidense.
Hasta el momento, alrededor de 28 000 residentes han sido evacuados. “No se trata solo de sobrevivir, se trata de cómo podemos ayudar a otros a superar sus propias batallas”, concluyó el hombre.
Créditos: YouTube | @cbssacramento
