En Estados Unidos, millones de jubilados dependen del cheque del Seguro Social como su principal fuente de ingresos. Este pago mensual cubre necesidades básicas como vivienda, alimentos y atención médica, pero muchas veces no es suficiente para enfrentar los altos costos de vida.
Tomar decisiones estratégicas en cuanto a la edad de jubilación, la duración del historial laboral y maximizar los ingresos durante la vida activa puede incrementar significativamente el monto de los pagos mensuales del Seguro Social. Comprender cómo funciona este sistema y qué opciones están disponibles es clave para asegurar una pensión que ayude a cubrir las necesidades económicas en la jubilación.
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El impacto de la edad en los beneficios del Seguro Social
El momento en que decidas comenzar a recibir los beneficios del Seguro Social es crucial. Por ejemplo, quienes optan por cobrar a los 62 años reciben un monto reducido, con un promedio de U$D 1 465 mensuales. Si esperas hasta los 67 años, cuando alcanzas la Edad de Jubilación Completa (FRA), este monto puede subir a U$D 2 119. Si decides postergar los pagos hasta los 70 años, el cheque puede incrementarse aún más, llegando a U$D 2 634 mensuales.
Adicionalmente, el historial laboral también juega un papel fundamental. Haber trabajado al menos 35 años es clave, ya que la Administración del Seguro Social toma como referencia los 35 años con los mayores ingresos. Si no completas este periodo, los años faltantes se cuentan como cero, lo que puede reducir considerablemente la pensión mensual, incluso si alcanzas la edad de jubilación.
Maximiza los ingresos durante tu carrera profesional
El nivel de ingresos durante tu vida laboral tiene un impacto directo en la cantidad que recibirás del Seguro Social. Aquellos que ganan más y están sujetos a los impuestos más altos del Seguro Social (salario máximo de U$D 160 200 en 2025) pueden esperar recibir pagos más altos en su jubilación. Si alcanzas este umbral durante 35 años de trabajo, podrías calificar para un pago mensual máximo de U$D 5 108.
Para quienes no alcanzan este nivel de ingresos, es importante recordar que el sistema del Seguro Social está diseñado para premiar a quienes ganan más, lo que hace que planificar una carrera profesional con buenos ingresos sea una de las mejores estrategias para aumentar el monto de la pensión.
El ajuste por inflación y otros factores
Además de las decisiones sobre cuándo comenzar a recibir los beneficios y cómo maximizar los ingresos, otro factor clave para el monto de los pagos es el ajuste anual por inflación. La Administración del Seguro Social ajusta los pagos en función del Índice de Precios al Consumidor (CPI), lo que ayuda a que los pagos mantengan su poder adquisitivo frente a la creciente inflación. Sin embargo, este ajuste no reemplaza la necesidad de tomar decisiones estratégicas durante la carrera profesional para maximizar los pagos desde el principio.
Con una planificación adecuada y la estrategia correcta, es posible mejorar considerablemente la pensión mensual del Seguro Social, lo que puede ayudar a enfrentar mejor los desafíos económicos durante la jubilación.
Créditos vídeo: YouTube | @usaenespanol.
