por Zoé Pardo
Periodista
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Los padres enfrentan decisiones cruciales al elegir la educación de sus hijos, ya sea optando por escuelas públicas o privadas, cada una con sus propios costos asociados. Aunque las escuelas públicas no requieren un pago de matrícula, los padres aún deben considerar otros gastos relacionados.
Tendencia a subir
Según datos de la Encuesta Anual de Finanzas del Sistema Escolar, el gasto promedio por estudiante en las escuelas públicas de Estados Unidos fue de U$D 14 347 y al parecer la tendencia crece, aunque no se ha vuelto a hacer un censo en los últimos años sobre este tema. Sin embargo, este costo varía significativamente de un estado a otro, siendo Nueva York el que encabeza la lista con un gasto de U$D 26 571 por alumno.
En contraste, los estados que gastaron menos por estudiante incluyen a Idaho y Utah, con cifras por debajo de los U$D 10 000. Esta disparidad refleja las diferencias en la financiación y las prioridades educativas en todo el país.
Diversos factores
Por otro lado, la educación privada presenta costos más elevados, con matrículas que pueden oscilar entre U$D 5 330 y U$D 25 180 por año, dependiendo de diversos factores como la afiliación religiosa y el nivel educativo. Esta inversión significativa puede alcanzar un total de U$D 292 719.86 para un niño que asista desde el jardín de infantes hasta el grado 12.
Ante esta realidad, los padres se enfrentan a la difícil tarea de equilibrar la calidad educativa con la viabilidad financiera. Ya sea optando por una escuela pública o privada, la educación sigue siendo una prioridad para las familias estadounidenses, aunque con diferentes implicaciones económicas.
