por Alessa Basso
Periodista
Actualizado el
Tener un número de Seguro Social (SSN, por sus siglas en inglés) es fundamental para muchas actividades en Estados Unidos: trabajar legalmente, pagar impuestos, acceder a beneficios y hasta abrir una cuenta bancaria.
Sin embargo, no cualquiera puede solicitarlo. Uno de los requisitos más importantes es estar “autorizado a trabajar” en el país. Esta frase, aunque parece sencilla, tiene implicancias legales y migratorias que conviene entender con claridad.
Estar “autorizado a trabajar” significa que el gobierno de EE.UU. te ha dado permiso legal para desempeñar una actividad laboral remunerada. Esto puede ocurrir de diferentes maneras, dependiendo del estatus migratorio de cada persona.
Ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes (titulares de la Green Card) están automáticamente autorizados. En el caso de personas con visas temporales o en proceso migratorio, la autorización depende de si el tipo de visa permite empleo o si se ha emitido un documento llamado Employment Authorization Document (EAD).
Te recomendamos
¿Qué documentos prueban que estás autorizado a trabajar?
El documento más común es el EAD, conocido como “permiso de trabajo”, que se otorga a personas en ciertas categorías migratorias, como solicitantes de asilo, beneficiarios de TPS, DACA, o quienes tienen una solicitud de ajuste de estatus en trámite.
Este documento contiene una fecha de vencimiento y debe renovarse. También las visas como la H-1B (para profesionales especializados), L-1 (transferencias dentro de empresas), o J-1 (intercambio) pueden incluir autorización laboral, aunque muchas veces está limitada a un empleador específico.
Cuando alguien solicita un SSN por primera vez, debe demostrar al Social Security Administration (SSA) que tiene esta autorización vigente. Es decir, no basta con estar en EE.UU. legalmente; se necesita permiso explícito para trabajar. De lo contrario, la solicitud será rechazada. Incluso si una persona ya obtuvo un SSN en el pasado, si pierde su autorización laboral no podrá seguir usándolo para fines laborales hasta renovarla.
Entender qué significa estar autorizado a trabajar no solo es clave para acceder al SSN, sino también para evitar problemas legales y asegurar que tu historial laboral esté correctamente registrado. Si tienes dudas sobre tu estatus o necesitas ayuda, es recomendable consultar con un abogado de inmigración o acudir a organizaciones comunitarias especializadas.
