La miel, un alimento que ha sido utilizado durante generaciones como un remedio natural o un endulzante, puede ser altamente riesgoso para los bebés menores de 12 meses. Según el Dr. Jorge Martínez Pérez, pediatra de la Sección de Gastroenterología y Nutrición del Hospital Universitario Infantil Niño Jesús de Madrid, la miel puede contener Clostridium botulinum, una bacteria que produce la toxina botulínica, causante de la enfermedad conocida como botulismo.
El botulismo afecta la transmisión neuromuscular y puede causar parálisis en diversas partes del cuerpo. En los casos más extremos, esta parálisis puede afectar los músculos respiratorios, poniendo en peligro la vida del bebé.
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Así afecta el botulismo a los bebés
A diferencia de los niños mayores o los adultos, los bebés tienen un sistema digestivo inmaduro que no puede combatir eficazmente las esporas de Clostridium botulinum. Esto aumenta el riesgo de que la bacteria germine y produzca la toxina botulínica en su organismo.
Los síntomas de botulismo en un bebé incluyen:
- Dificultades para tragar.
- Debilidad o letargo.
- Problemas respiratorios severos en casos avanzados.
El Dr. Martínez destaca que aunque los casos de botulismo infantil son raros, los riesgos son lo suficientemente graves como para justificar evitar completamente la miel durante el primer año de vida.
Conoce si es segura la miel en productos infantiles procesados
Algunos productos infantiles, como cereales que contienen miel, son seguros porque han sido sometidos a procesos de alta presión y temperatura que eliminan cualquier bacteria peligrosa. Sin embargo, esto no aplica para la miel natural o artesanal, que puede estar contaminada.
Además, el pediatra señala que, incluso dejando de lado el riesgo de botulismo, la miel no es recomendable para los bebés debido a su alto contenido de azúcares, que puede fomentar el gusto por alimentos excesivamente dulces desde una edad temprana.
Recomendaciones para los padres
Para proteger la salud de tu bebé, considera estas recomendaciones:
- Evita la miel natural o artesanal: No importa si es comprada en una tienda o producida en casa, la miel no es segura para menores de 12 meses.
- Lee las etiquetas: Asegúrate de que cualquier producto infantil que adquieras haya pasado por los procesos adecuados de esterilización.
- Limita el consumo de azúcares: Ofrecer alimentos naturales y no procesados ayudará a desarrollar hábitos alimenticios saludables en tu bebé.
