El gobierno de Texas, encabezado por el gobernador Greg Abbott, anunció un refuerzo significativo a la barrera flotante instalada en el Río Bravo y la extensión de la red de alambre de púas en Eagle Pass, con el objetivo de reducir los cruces irregulares desde México.
La medida forma parte de la operación Lone Star, una iniciativa lanzada en marzo de 2021 para enfrentar el aumento de la inmigración irregular en Estados Unidos.
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Refuerzo de barreras flotantes
Las boyas flotantes, ubicadas cerca del Puente Internacional 1 que conecta Piedras Negras, Coahuila, con Eagle Pass, han sido un punto central de las estrategias texanas.
Según datos proporcionados por la oficina del gobernador, desde la implementación de Lone Star, los cruces irregulares hacia Texas disminuyeron un 86%. Además, esta operación ha derivado en la detención de más de 526 000 inmigrantes y la presentación de más de 41 000 cargos por delitos graves.
Asimismo, Abbott afirmó en su cuenta de X que las barreras flotantes permanecerán, a pesar de los intentos de la administración Biden de eliminarlas debido a preocupaciones humanitarias y ambientales. En julio de 2023, un tribunal permitió que estas estructuras continuaran operativas, desestimando las objeciones del gobierno federal.
Polémica sobre las medidas fronterizas
La barrera flotante, instalada inicialmente en 2023, ha sido objeto de críticas tanto por el gobierno de Biden como por grupos defensores de derechos humanos y medioambientales. Señalan que estas estructuras no solo carecen de autorización federal, sino que también representan riesgos para la seguridad de los inmigrantes.
Créditos: YouTube | @milenio