El gobierno de Biden, a través de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB, por sus siglas en inglés), ha anunciado un nuevo reglamento que reducirá significativamente las tarifas por sobregiro que los bancos pueden cobrar a sus clientes. La medida establece un límite máximo de U$D 5 por sobregiro, a menos que los bancos adopten una de las siguientes alternativas:
- Cobrar una tarifa que refleje únicamente el costo real para cubrir el sobregiro.
- Tratar el sobregiro como un préstamo, ofreciendo a los clientes la opción de abrir una línea de crédito específica.
Esta regulación, que aplica únicamente a los bancos con más de U$D 10 millones en activos, entrará en vigor en octubre de 2025, siempre que supere las posibles impugnaciones legales de la industria bancaria.
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Impacto potencial para los consumidores
Se estima que la nueva norma generará ahorros de hasta U$D 5 mil millones al año para los clientes bancarios, lo que equivale a U$D 225 por hogar que normalmente paga tarifas de sobregiro. Esto supone un alivio importante para millones de estadounidenses que han enfrentado penalidades que, en promedio, superan los U$D 30 por transacción.
"Durante demasiado tiempo, los bancos más grandes han explotado vacíos legales para extraer miles de millones de las cuentas de los estadounidenses", señaló Rohit Chopra, director de la CFPB.
Críticas de la industria bancaria
A pesar de los beneficios proyectados para los consumidores, los líderes del sector bancario han expresado su preocupación por las consecuencias no deseadas de esta medida. Lindsey Johnson, presidenta de la Asociación de Banqueros al Consumidor (CBA), advirtió que limitar las tarifas podría reducir el acceso a servicios de protección por sobregiro, empujando a los clientes más vulnerables hacia alternativas menos deseables como préstamos de día de pago o casas de empeño.
Además, la Asociación de Banqueros Estadounidenses (ABA) señaló en un comunicado que la mayoría de los consumidores valoran la protección contra sobregiros y prefieren que el banco cubra los pagos, incluso si conlleva un cargo.
Créditos del video: Youtube | NBC News
El contexto detrás del cambio
La medida se enmarca en una campaña más amplia de la administración Biden contra las llamadas tarifas basura, que incluyen cargos excesivos por retrasos en pagos de tarjetas de crédito y costos ocultos en boletos de eventos. En los últimos años, la presión de legisladores y reguladores llevó a que muchos bancos redujeran o eliminaran voluntariamente las tarifas por sobregiro.
Según un informe previo de la CFPB, las tarifas por sobregiros y fondos insuficientes disminuyeron casi a la mitad desde 2019, pasando de U$D 3100 millones en el cuarto trimestre de ese año a U$D 1600 millones en el mismo periodo de 2022. Sin embargo, muchos bancos aún las aplican en ciertas circunstancias, con un promedio de U$D26.61 por tarifa en 2023.
Lo que sigue para los consumidores y la industria
Si bien la nueva regla promete un alivio financiero para millones de estadounidenses, su implementación podría redefinir la relación entre los bancos y sus clientes. La industria bancaria advierte que limitar las tarifas podría dificultar la sostenibilidad de ciertos servicios. Por otro lado, los defensores de los consumidores ven en esta regulación una oportunidad para equilibrar el poder entre los grandes bancos y las familias trabajadoras.
El impacto real de esta medida dependerá de cómo los bancos ajusten sus políticas y de si la regulación supera los desafíos legales que ya se anticipan.