En 1995, Angie Hicks estaba a punto de comenzar una carrera tradicional como consultora en Washington D.C., pero una oferta inesperada de su exjefe, Bill Oesterle, cambió el rumbo de su vida. Él le propuso cofundar un servicio para conectar propietarios con contratistas confiables en Columbus, Ohio, inspirado en una plataforma similar que había usado en Indianápolis.
El desafío era enorme: una paga de U$D 20 mil al año y el riesgo de construir un negocio desde cero. Para Angie, una introvertida, la tarea de salir y reclutar miembros para el servicio parecía un obstáculo abrumador. Aun así, decidió arriesgarse, siguiendo el sabio consejo de su abuelo: "Mejor fracasar a los 23 que no haberlo intentado".
Créditos del video: Instagram | @angi
Superando el miedo y construyendo una marca
El primer año fue duro. Angie enfrentó su mayor temor: hablar con extraños. Pero, en lugar de rendirse, desarrolló un enfoque práctico. Se preparaba con guiones detallados para cada interacción y se imponía metas pequeñas y manejables, como vender una membresía al día. A medida que lograba pequeños triunfos, ganaba confianza. Con el tiempo, Angie’s List comenzó a crecer, llegando a los 1mil miembros en su primer año. Este fue el punto de inflexión que demostró que su idea tenía el potencial de convertirse en un negocio real.
El crecimiento exponencial de Angie’s List
A partir de ese éxito inicial, Angie’s List empezó a expandirse rápidamente. En 1996, el nombre de la empresa cambió oficialmente a Angie’s List, ya que los clientes comenzaban a identificar el servicio directamente con Angie. A través de su modelo de negocio, que permitía a los usuarios calificar a contratistas y compartir reseñas, la plataforma se hizo esencial para los propietarios de viviendas que buscaban servicios confiables. En pocos años, la compañía se trasladó a Indianápolis y creció a nivel nacional.
En 2011, Angie’s List salió a la bolsa, consolidando su estatus como un jugador importante en la industria de servicios para el hogar. Su éxito no solo se debía a su enfoque innovador en las calificaciones y revisiones de contratistas, sino también a su capacidad para adaptarse a las necesidades cambiantes del mercado. La empresa evolucionó, pasando de un modelo de suscripción a ofrecer servicios gratuitos para los usuarios, financiado por contratistas que pagaban por anunciarse en la plataforma.
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En 2021, Angie’s List cambió de nombre a Angi, un movimiento que reflejaba la transformación de la compañía. Ya no era solo una lista de recomendaciones locales, sino un actor dominante en un mercado de servicios valorado en U$D 90 millones. Con millones de solicitudes de servicios gestionadas anualmente, Angi ha logrado mantener su posición como la opción principal para quienes buscan servicios del hogar en todo Estados Unidos.
