La historia de los Santoyo es un reflejo del espíritu de superación de muchos inmigrantes. "Llegamos como todos, sin dinero, sin documentos, sin casa, sin nada. Esto fue hace más de 30 años, cuando dejamos Zacatecas en México", recordó Juan Manuel para Univision Noticias.
En su afán por salir adelante, comenzaron vendiendo tamales en la calle, conquistando a la comunidad latina con su sazón. Durante casi diez años trabajaron incansablemente como vendedores ambulantes, enfrentando largas jornadas laborales que llegaban hasta las 15 horas diarias.
"El mayor motor fue querer salir de la pobreza", confesó Juan Manuel. La receta del éxito, según ellos, no radica solo en el arduo trabajo, sino también en el amor y la constancia que le ponen a cada tamal que elaboran.
Créditos del video: Youtube | Noticias Estrella TV
De la calle al éxito empresarial
Después de casi una década vendiendo tamales en las calles, su esfuerzo rindió frutos. Fueron capaces de fundar Tamales Liliana’s, nombrado en honor a su hija, un negocio que rápidamente creció en popularidad. "Nos dimos cuenta de que había una necesidad en la comunidad latina de los tamales que hacíamos", señaló Juan Manuel.
Este éxito no solo se mide en cifras, sino también en reconocimiento. En 2019, el entonces candidato presidencial Joe Biden visitó su local en Los Ángeles durante una campaña, probando uno de sus famosos tamales: el de chile verde.
Un legado en crecimiento
Para los Santoyo, el éxito no se detiene aquí. Sueñan con que sus hijos continúen con el negocio familiar y lo lleven a nuevas alturas. "Si ellos deciden seguir con esto, nosotros les daremos todo el apoyo", aseguró Juan Manuel, quien siempre ha tenido claro que la clave para triunfar es nunca rendirse.
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