El actor de origen chileno es el protagonista de dos populares eries: interpreta a Joel en The Last Of Us, la aclamada adaptación del videojuego, y al enigmático guerrero Din Djarin en The Mandalorian. Ambos papeles han consolidado su lugar en la élite del entretenimiento global, pero el camino para llegar allí no fue fácil.
Antes de conquistar la televisión, Pascal dejó su huella interpretando al agente de la DEA, Javier Peña, en las tres temporadas de Narcos (2015-2017) y se ganó el cariño del público como Oberyn Martell en la cuarta temporada de Game of Thrones.
Un camino complejo hacia Estados Unidos
Pedro Pascal, cuyo nombre completo es José Pedro Balmaceda Pascal, proviene de una familia marcada por la agitación política de Chile. Su padre, José Balmaceda, era médico especializado en reproducción, y su madre, Verónica Pascal, psicóloga infantil y prima de Andrés Pascal Allende, un destacado líder del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Tras el golpe de estado de Pinochet en 1973, la familia se vio obligada a huir y solicitar asilo en la embajada de Venezuela, lo que les llevó eventualmente a Dinamarca y, finalmente, a Estados Unidos, donde Pedro y su hermana Javiera crecieron.
Pascal ha hablado abiertamente sobre sus orígenes y el impacto que tuvo su experiencia como refugiado en su vida y carrera. “Nos ofrecieron asilo político en Dinamarca y luego una oferta de trabajo en Estados Unidos. Así fue como crecí aquí. Este es un país donde gente de todo el mundo viene a dar lo mejor de sí”, ha comentado el actor, destacando la importancia de la diversidad cultural en su formación.
Créditos del video: Youtube | OcurrenciasTV
Una pasión desde la infancia
A los 11 años, ya asentado en Orange County, California, Pascal comenzó a mostrar su pasión por el cine. Aunque el reconocimiento no llegó hasta su madurez, a sus 47 años sigue recordando con nostalgia aquellos momentos en los que soñaba con ver su rostro en los carteles de Hollywood.
En 1993, Pedro Pascal se mudó a Nueva York para estudiar Arte Dramático en la Tisch School of the Arts de la Universidad de Nueva York. Durante ese tiempo, su familia enfrentó una situación difícil cuando su padre estuvo involucrado en un escándalo en la clínica de fertilidad que dirigía en Orange County. Como resultado, sus padres y sus hermanos menores regresaron a Chile.
Te recomendamos
A los 24 años, la vida de Pascal sufrió un golpe devastador cuando su madre se suicidó. En honor a ella, decidió cambiar su nombre artístico de Pedro Balmaceda a Pedro Pascal, adoptando el apellido materno como un tributo. “Siempre me apoyó de una manera increíble, sentí que ella sabía algo que yo no. Nada de mi éxito sería real sin ella”, reveló el actor en una entrevista.
Un futuro brillante en Hollywood
Hoy, Pedro Pascal es mucho más que un actor; es un símbolo de perseverancia y éxito. Desde sus días como refugiado hasta convertirse en una de las estrellas más aclamadas de Hollywood, Pascal continúa escribiendo su historia, una que inspira a muchos alrededor del mundo.
