Las compañías aéreas también enfrentan dificultades y debilidades, las mismas que se reflejan en retrasos e incluso cancelaciones de vuelos, causando molestias a sus clientes.
Debido a esto, muchos pasajeros ya tienen en la mira a varias aerolíneas que padecen estos problemas, lo que a menudo resulta en la retirada del mercado por falta de ventas o clientes.
Bajo este contexto, la Oficina de Estadísticas de Transporte de Estados Unidos, NerdWallet, realizó un análisis para determinar qué aerolíneas en Estados Unidos tienen mayor riesgo de retrasos y cancelaciones en sus vuelos.
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A continuación, te presentamos la lista de las aerolíneas que enfrentan estos problemas:
- Frontier Airlines: puntualidad del 67%, con un 30,71% de demoras y un 2,13% de cancelaciones.
- JetBlue: puntualidad del 67%, con un 30,4% de demoras y un 2,1% de cancelaciones.
- Spirit Airlines: 28,59% de demoras y un 1,7% de cancelaciones.
- American Airlines: 22,74% de vuelos retrasados y un 1,06% de cancelados.
- United Airlines: puntualidad del 78,07%, con un 20,27% de vuelos retrasados y un 1,4% de cancelaciones.
- Delta Air Lines: puntualidad del 82,61%, con un 16,17% de vuelos retrasados y un 1,02% de cancelaciones.
- Hawaiian Airlines: puntualidad del 75,2%, con un 23,41% de retrasos y un 1,3% de cancelaciones.
- Southwest Airlines: puntualidad del 77,25%, con un 21,55% de retrasos y un 1% de cancelaciones.
- Alaska Airlines: 19,42% de vuelos retrasados y un 0,81% de vuelos cancelados.
- SkyWest Airlines: puntualidad del 82,46%, con un 16,01% de vuelos retrasados y un 1,22% de vuelos cancelados.
Estos son los factores que influyen en los retrasos y cancelaciones:
Los retrasos y cancelaciones de vuelos pueden deberse a diversos factores, tales como:
- Condiciones climáticas: el mal tiempo, como tormentas, nieve o niebla, puede afectar la operación segura de las aeronaves, lo que resulta en retrasos o cancelaciones.
- Problemas técnicos: las averías mecánicas u otras fallas técnicas en las aeronaves pueden ocasionar retrasos o cancelaciones.
- Control de tráfico aéreo: la congestión en el espacio aéreo o problemas con el control de tráfico aéreo pueden provocar retrasos en los despegues y aterrizajes.
- Logística de la aerolínea: las aerolíneas pueden enfrentar problemas de personal, mantenimiento de aeronaves o programación de vuelos, lo que puede generar retrasos o cancelaciones.