Donna Osborne es una mujer estadounidense de 75 años oriunda de Lancaster, en el estado de Pensilvania, que hace unas semanas terminó favorablemente su tratamiento contra el cáncer de mama. Para celebrarlo, tenía pensado viajar con su hija a Florida para visitar a unos familiares.
Lamentablemente, el vuelo se retrasó algunas veces y ella decidió salir del aeropuerto y volver a casa. En camino, hizo una parada en la tienda Speedway en Oregon Pike. Como también era su cumpleaños, decidió comprarse un raspadito Monopoly Own It y se llevó un premio de U$D 5 millones.
“Estaba en el aeropuerto con mi hija. Íbamos de camino a visitar a la familia en Florida cuando el vuelo se retrasó. Bueno, se retrasó tantas veces que decidí volver a casa. Mi hija se quedó y voló a Florida. ¡Si no hubiera salido del aeropuerto, nunca habría comprado ese billete!”, indicó a los directivos de la lotería de Pensilvania.
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Como era de esperarse, Osborne jamás imaginó que perder un vuelo le permitiría volverse millonaria. “No podía creer lo que veía”, recuerda. “Volví a la tienda y le pregunté: ‘¿Puedes comprobar esto? ¿Está bien o mal?’. Y el empleado me dijo: ‘¡Está bien!'”.
Sin duda, esta motivación le ha dado otro aliento en su vida. Si bien no tiene claro qué hará con el premio, Donna ya planifica hacer otro viaje. “No sé qué hacer conmigo misma, tengo que seguir adelante. Creo que invertiré parte del premio, seguro, ¡pero luego iré a Alaska!“.
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