El inicio de la primavera y el ascenso de las temperaturas marcan en Texas el arranque de un periodo crítico: la temporada de serpientes. Los avistamientos se multiplican en patios, jardines y hogares, impulsados por la búsqueda de alimento, refugio y espacios de reproducción. En este contexto, autoridades y expertos insisten en extremar precauciones y aplicar medidas que impidan su ingreso a los espacios habitados.
Durante esta época, que se extiende desde mediados de marzo hasta finales del verano, el Texas Parks and Wildlife Department (TPWD) advierte sobre la necesidad de estar atentos. Las serpientes emergen de sus refugios invernales y, al encontrar ambientes propicios, pueden establecerse cerca de viviendas, aumentando las probabilidades de encuentros potencialmente peligrosos para las personas y sus mascotas.
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Acciones para prevenir el ingreso de serpientes en viviendas
Sellar cualquier abertura en paredes, puertas y ventanas resulta esencial para evitar que estos reptiles se introduzcan en el hogar. Además, mantener el césped bajo y eliminar escombros o pilas de madera limita el acceso de roedores, principales presas de las serpientes. Según el TPWD, iluminar adecuadamente las áreas exteriores durante la noche también puede disminuir los riesgos, ya que muchos de estos animales son más activos en la oscuridad.
En caso de hallar una serpiente dentro de la casa, se debe cerrar la habitación, mantener distancia y contactar a profesionales de control animal. Intentar manipular o matar al reptil puede resultar extremadamente peligroso, como advierten las autoridades estatales, quienes enfatizan que la intervención de especialistas capacitados es la opción más segura.
Identificación de serpientes venenosas
Texas es hogar de 76 especies de serpientes, pero solo unas pocas representan una amenaza real para los humanos. Entre las más peligrosas figuran la serpiente de cascabel, la boca de algodón y la cabeza de cobre, todas miembros de la familia de las víboras de foseta. Estas especies se distinguen por sus cabezas triangulares, pupilas verticales y órganos sensibles al calor ubicados entre ojos y narinas.
El TPWD señala que las serpientes de cascabel son reconocidas por su característico sonido de advertencia. La boca de algodón, asociada a zonas acuáticas, puede mostrar comportamientos defensivos agresivos, mientras que la cabeza de cobre utiliza su camuflaje natural para pasar desapercibida. Frente a un encuentro, la recomendación es no acercarse, no capturar al animal y dar aviso a los servicios de emergencia. En caso de mordedura, buscar atención médica inmediata es crucial para evitar complicaciones graves.