Muchas familias deciden adoptar mascotas para gozar de la felicidad que traen estos pequeños animalitos. Y eso es precisamente lo que hizo un clan en Japón, que acogió un perro; sin embargo, su crecimiento inusual causó sorpresa en muchos. Finalmente, descubrieron que el 'perrito' era un oso en peligro de extinción, causando revuelo en las redes sociales.
Una historia sin igual
La historia de Blackie, nombre del perro que pasó a ser oso en dos años, comenzó en una carretera. Su Yun le compró a una familia el presunto perro mastín tibetano, una clase de perrito de pelaje negro que puede llegar a pesar 80 kilos.
Blackie fue criado cómo un perro, pero después de dos años su comportamiento cambió drásticamente. Los dueños decidieron llevarlo al veterinario, pues no era común que comiera una caja de frutas y otra de fideos al día.
Otros aspectos que provocaron la duda de sus dueños fueron que el ‘perro’ podía pararse de dos patas por mucho tiempo, algo inusual para el mastín tibetano. Además, su ladrido era un tanto extraño, pues se asemejaba más a un gruñido.
¡Era un oso!
Luego de ser llevado al veterinario y ser analizado por expertos, se reveló que Blackie no era un perro, sino un oso negro asiático. El ‘perrito’ había sido criado cómo algo que no era. Cabe resaltar que esta especie de oso está en peligro de extinción, lo que hace más asombroso el caso de Blackie.
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Lamentablemente para la familia de Su Yun, Blackie fue llevado al Centro de Rescate de Vida Silvestre en Yunnan por las autoridades chinas. Esto debido a su condición de animal en peligro de extinción. Pese a esto, sus amos suelen visitar diariamente a Blackie. Ellos manifestaron que se encuentran tranquilos de que su mascota esté en su hábitat natural.
