Los beneficios retroactivos del Seguro Social en Estados Unidos son pagos que se otorgan a personas elegibles que no solicitaron sus beneficios en el momento en que comenzaron a calificar. Esto puede suceder cuando una persona que cumple con los requisitos decide retrasar su solicitud de beneficios de jubilación o incapacidad, pero luego se da cuenta de que hubiera podido recibir pagos antes de la fecha en la que finalmente presentó la solicitud.
A través de los beneficios retroactivos, la Administración del Seguro Social (SSA, por sus siglas en inglés) puede emitir un pago por los meses en los que la persona era elegible, pero no lo reclamó.
Es importante destacar que la cantidad máxima de beneficios retroactivos a los que una persona puede acceder varía según el tipo de beneficio que esté reclamando.
Para los beneficios de jubilación, la SSA permite hasta seis meses de pagos retroactivos si el solicitante es mayor de la plena edad de jubilación. En el caso de los beneficios por incapacidad, los pagos retroactivos pueden cubrir un período de hasta 12 meses previos a la fecha de la solicitud, siempre que la persona pueda demostrar que era incapaz de trabajar durante ese tiempo.
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¿Cómo reclamar los beneficios retroactivos?
Para reclamar los beneficios retroactivos del Seguro Social, el primer paso es presentar una solicitud formal ante la Administración del Seguro Social. En la solicitud, es crucial indicar claramente la intención de recibir pagos retroactivos, ya que no siempre se otorgan automáticamente.
La SSA evaluará el caso y determinará el período exacto de retroactividad que corresponde al solicitante, basándose en la fecha de elegibilidad.
Una vez presentada la solicitud, la SSA puede requerir documentación adicional que justifique la elegibilidad durante el período en cuestión. En los casos de incapacidad, por ejemplo, será necesario presentar evidencia médica que confirme que la persona no estaba en condiciones de trabajar durante el tiempo por el que está solicitando los pagos retroactivos.
En el caso de jubilación, el proceso es más sencillo, ya que solo se requiere verificar la fecha en que la persona cumplió con la edad necesaria para comenzar a recibir beneficios.
Es importante tener en cuenta que, aunque los pagos retroactivos pueden representar una suma considerable, el retraso en la solicitud de los beneficios de jubilación puede afectar negativamente el monto mensual que se recibe a largo plazo, por lo que es fundamental considerar todas las opciones antes de decidir cuándo comenzar a recibir el Seguro Social.
Créditos: María Díaz Seguro Social | @mariadiazsegurosocial