El Seguro Social en Estados Unidos es una fuente vital de ingresos para millones de personas jubiladas, discapacitadas y sus familias. Sin embargo, para recibir beneficios completos del programa, es necesario haber trabajado y contribuido al sistema durante al menos 10 años o haber acumulado 40 créditos de trabajo.
Esto puede representar un desafío para inmigrantes o adultos mayores que no han cumplido con los requisitos debido a diferentes circunstancias. Aunque no hayan contribuido directamente al Seguro Social, aún existen opciones para asegurar ingresos en la jubilación o ante una incapacidad.
Una alternativa importante es la Supplemental Security Income (SSI) o Ingreso Suplementario de Seguridad. Este programa, financiado por el gobierno federal, brinda ayuda financiera a personas mayores de 65 años, ciegas o discapacitadas con ingresos limitados, independientemente de si contribuyeron al Seguro Social.
Otro recurso es la Asistencia Médica (Medicaid), un programa que brinda cobertura de salud a individuos de bajos ingresos y podría cubrir tratamientos médicos importantes, lo que ayuda a reducir gastos en la tercera edad.
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Opciones para quienes no han contribuido
Para los inmigrantes, existe la posibilidad de obtener beneficios a través de un cónyuge que sí haya contribuido. Si tu pareja ha trabajado y pagado impuestos al Seguro Social, podrías ser elegible para recibir hasta el 50% de su beneficio de jubilación. Además, aquellos inmigrantes que se naturalizan ciudadanos de EE. UU. y trabajan el tiempo suficiente para reunir créditos de trabajo, también podrán recibir beneficios en el futuro.
Otra opción disponible para las personas mayores sin historial laboral suficiente es el acceso a programas de asistencia local y estatal. Varias organizaciones benéficas y agencias gubernamentales ofrecen apoyo financiero, descuentos en servicios públicos, ayuda para alimentos, entre otros.
Por ejemplo, Medicare Savings Programs puede ayudar a cubrir los costos de las primas de Medicare, deducibles y copagos para adultos mayores con bajos ingresos. Estas opciones no solo alivian la carga económica, sino que también proporcionan una red de apoyo esencial para inmigrantes y personas mayores sin contribuciones al Seguro Social.
Créditos: María Díaz Seguro Social | @mariadiazsegurosocial
