El sueño es una actividad crucial para el desarrollo del cerebro en los recién nacidos, quienes pasan alrededor de la mitad de su tiempo dormidos en la etapa de sueño MOR (movimientos oculares rápidos). Durante los primeros meses de vida, los bebés no distinguen entre el día y la noche, lo que los lleva a dormir en intervalos cortos y a despertarse frecuentemente para alimentarse. Sin embargo, es posible comenzar a establecer hábitos de sueño saludables desde el principio.
A continuación, compartimos algunos consejos prácticos recomendados por Mayo Clinic que pueden funcionar para que un bebé duerma sin ningún problema.
Rutinas de sueño
Una de las primeras estrategias recomendadas para ayudar a que el bebé duerma mejor es seguir una rutina tranquila para la hora de dormir. Mantener la habitación en silencio y con luces bajas, evitar juegos y hablar en voz baja antes de acostar al bebé, puede marcar la diferencia.
Es importante llevar al bebé a la cama cuando esté somnoliento pero aún despierto, para que aprenda a asociar su cuna con el proceso de quedarse dormido.
Créditos video: YouTube | @Mayo Clinic
Misma habitación
La seguridad también es un aspecto vital. Los expertos recomiendan que el bebé duerma en la misma habitación que los padres, pero en una cuna propia, al menos durante los primeros seis meses de vida, idealmente hasta el primer año. Esto puede ayudar a reducir el riesgo de síndrome de muerte infantil súbita.
Además, es esencial asegurar que el bebé duerma sobre un colchón firme y plano, sin frazadas ni elementos blandos que puedan causar asfixia.
Paciencia
Por último, permitir que el bebé se acomode por sí mismo es fundamental. Es normal que el bebé esté inquieto o llore durante unos minutos antes de quedarse dormido.
Los padres pueden esperar un breve período antes de intervenir. Envolver al bebé o usar un chupete también puede ser útil para algunos bebés, pero siempre con precauciones para asegurar su bienestar y seguridad. Si los padres tienen dudas o preocupaciones, consultar con el proveedor de atención médica del bebé es siempre una buena opción.