Durante más de dos años, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha enviado a miles de inmigrantes que recientemente llegaron a la frontera sur hacia ciudades administradas por demócratas.
Sin embargo, en las últimas semanas, los autobuses han dejado de circular en las localidades fronterizas. Texas no envió ningún autobús en julio según informes y el último viaje registrado fue el 27 de junio: 50 inmigrantes fueron trasladados desde la frontera cerca de El Paso a Nueva York.
Créditos del video: Youtube | CBS News
El hecho de la disminución
Las autoridades de Texas han atribuido la disminución en el envío de autobuses a la reducción en el número de aquellos que cruzan ilegalmente el límite. ‘Texas ha disminuido los cruces ilegales en el estado en más del 85% gracias a nuestra histórica misión fronteriza’, declaró Andrew Mahaleris, portavoz de Abbott. Este resultado coincide con una orden ejecutiva del actual presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, la cual fue emitida a principios de junio que acortaba la concesión de asilo a inmigrantes, resultando en una disminución del 32% en las aprehensiones en Texas durante ese periodo y continuando en julio, marcando una tendencia a la baja.
El portavoz sostiene que la consecución positiva se debe a la Operación Lone Star, una misión fronteriza de Texas lanzada en marzo de 2021 con un costo de U$D 11 mil millones. En consecuencia, esta acción ha movilizado a miles de tropas de la Guardia Nacional de dicho estado, además de oficiales del Departamento de Seguridad Pública para patrullar el área limítrofe y arrestar a inmigrantes bajo cargos estatales.
Reacciones y patrones de inmigración
Las ciudades que han recibido autobuses con inmigrantes provenientes de Texas han enfrentado complicados desafíos para manejar la afluencia de personas, incluyendo la apertura de nuevos refugios y el enfrentamiento de costos imprevistos que han forzado sus presupuestos. En respuesta a ello, Eric Adams, alcalde de Nueva York, firmó una orden ejecutiva que exige a las compañías de autobuses enviar una notificación a las autoridades antes de transportar extranjeros inmigrantes a la ciudad.
Expertos en inmigración y políticas exteriores comentaron que estos patrones suelen fluctuar debido a cambios en las políticas fronterizas de los Estados Unidos y condiciones climáticas extremas, como el calor durante los meses de verano. Cabe destacar que, desde que Abbott inició el programa en 2022, Texas ha transportado aproximadamente a 119 mil inmigrantes hacia otros estados, según cifras compartidas por su oficina la semana pasada. Sin embargo, con la disminución reciente en las entradas, el futuro de este programa podría estar en duda.