Sam Perkins (38) quien reside en la ciudad de Charlotte, en Carolina del Norte, fue una de las víctimas que registró el huracán Helene. Hace unos días contó que caminó hasta 11 millas y 2200 pies de altura para poder volver a casa y reencontrarse con sus padres.
Según una publicación que hizo en Facebook, Sam estaba preocupado por su familia, ya que “viven en una joya absoluta de las montañas de NC (el área de Little Switzerland, Spruce Pine, Burnsville), a mitad de camino entre Asheville y Boone. Bajo circunstancias normales, está gratamente muy aislado”.
Se quedó en shock por el huracán
En post Sam también indicó que no sabía que el huracán Helene había pasado por esa zona, motivo por el cual no reconoció el camino de vuelta a casa. Según contó a CNN, su preocupación era grande, ya que sus padres pasan los 70 años.
“Nunca me había sentido tan aliviado de ver a alguien bien. Simplemente los abracé, lloré, les conté todas las novedades que se estaban perdiendo… Caminé por la propiedad, los ayudé a decidir cómo abordar algunos desafíos”, recordó en Facebook.
Luego, Sam también contó que “Se fue la luz hace un par de semanas. No puedo imaginar cuánto tiempo le llevará (al Departamento de Transporte) reparar las carreteras con curvas que bordean las empinadas laderas de las montañas”.
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