Centenas de ganadores de la lotería en Estados Unidos han obtenido premios mayores a los U$D 2 millones a lo largo de la historia. Pero pocos experimentaron los giros desafortunados como Suzanne Mullins, residente de Virginia.
Después de descubrir que su boleto de lotería era el ganador, Mullins compartió la noticia con su familia y decidió repartir el premio con su esposo e hija. La anadora optó por recibir pagos anuales en lugar de la suma global, lo que resultó en alrededor de U$D 45 000 al año durante 20 años.
Ganó más de U$D 4.3 millones el la lotería, en 1997, la mujer pensó que su vida estaría resuelta, la falta de una gestión financiera adecuada la dejó endeudada y sin un centavo en menos de siete años
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Cambio repentino
No obstante, el cambio en las reglas de la lotería de Estados Unidos, en 2000, permitió a los ganadores solicitar el pago total del premio. En ese momento, Mullins dejó de cumplir con los pagos de un préstamo pendiente, lo que la llevó a un prolongado litigio con la entidad prestamista.
Después de cuatro años en conflicto legal, la empresa ganó el caso y exigió el pago de más de U$D 160 000. Para entonces, la mujer ya no tenía los recursos necesarios, ya que había gastado su premio en lujos y viajes, mientras que su familia también derrochó el dinero en placeres personales, dejándolos sin nada en poco tiempo.
La historia de Mullins sirve como un recordatorio de la importancia de buscar asesoramiento profesional al recibir grandes premios de lotería. A menudo, los ganadores se dejan llevar por la emoción del momento y no planifican adecuadamente el manejo de su fortuna.
Créditos: YouTube | @ListopediaYT
