En medio de los incendios forestales que devastaron miles de hectáreas en California, un perro llamado Riley se destacó por su labor en la detección de restos humanos. Este pastor belga malinois, de ocho años, fue rescatado del abandono y entrenado para misiones de búsqueda y rescate en desastres naturales.
Junto a su guía, Peter Sellas, Riley trabaja con el Grupo de Trabajo 6 de Búsqueda y Rescate Urbano de California, unidad que responde a emergencias bajo la coordinación de FEMA. Su desempeño fue fundamental en la comunidad de Altadena, donde el fuego dejó decenas de víctimas y destruyó miles de estructuras.
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Un olfato entrenado para salvar vidas
Riley es un perro especializado en detectar restos humanos, una de las tareas más complejas dentro de las operaciones de rescate. Entrenado para diferenciar olores en condiciones extremas, este can recorre zonas quemadas guiado por su cuidador y se detiene al encontrar señales, esperando su recompensa. Su historia de superación, desde el abandono hasta convertirse en héroe, demuestra el valor incalculable del vínculo entre humano y animal en situaciones límite.
