Siendo una pieza fundamental del ingreso en los Estados Unidos, el Seguro Social representa casi un tercio de los ingresos para aquellos jubilados de 65 años o más. A pesar de su importancia, gran parte de la población no conoce algunos de los factores cruciales que afectan la cantidad de sus beneficios.
Tanto si te acercas a la jubilación como si todavía te quedan años en tu carrera, acceder a un seguro como tal sin haber entendido del todo puede jugar en contra. Algunas reglas menos conocidas te permitirán maximizar tus pagos mensuales, especialmente asegurar una jubilación más cómoda y satisfactoria para el bien de uno.
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Estrategias que nunca fueron reveladas
1. Trabaja al menos 35 años para maximizar tus beneficios
Tres factores principales influyen en la cantidad de tu beneficio: la edad en la que comienzas a reclamarlo, tus ingresos a lo largo de tu carrera y la duración de esta. Si bien la mayoría conoce los primeros dos, alrededor del 65% de los adultos en los Estados Unidos no sabe que trabajar menos de 35 años reducirá sus beneficios.
La Administración del Seguro Social (SSA, siglas en inglés) calcula tu beneficio promediando tus ingresos durante este periodo mencionado en los que más ganaste. Posteriormente, se ajusta por inflación y se aplica una fórmula para determinar tu cantidad de seguro primario, es decir, el beneficio al que tienes derecho basado en tu historial laboral. De esta forma, se agregarán algunos ceros a tu promedio de ingresos que reducirá tus pagos mensuales.
2. Solicitar el beneficio antes de la edad de jubilación completa reduce permanentemente el monto
La cantidad de seguro primario que se calcula en función de tus ingresos durante tu carrera es lo que recibirás si solicitas tu beneficio al llegar a la Edad Plena de Jubilación (FRA, siglas en inglés). Para aquellos nacidos en 1960 o después, la FRA es de 67 años, lo que significa que deberás esperar hasta esa edad para recibir el 100% de tu beneficio.
Si decides solicitarlo antes, por ejemplo, a los 62 años, tu beneficio se reducirá hasta en un 30%. Un error común es creer que, al llegar a la FRA, el beneficio se ajustará automáticamente al monto completo. Sin embargo, esta reducción es permanente y no habrá un aumento posterior una vez alcanzada esta edad.
3. Tienes una oportunidad para revertir tu decisión dentro de los 12 meses de solicitar el beneficio
Elegir la edad en la que solicitarás tu beneficio del Seguro Social es una decisión que afectará tus ingresos mensuales por el resto de tu vida. Sin embargo, si cambias de opinión poco después de reclamarlo, tienes una única oportunidad para retractarte.
Dentro de los 12 meses de haber solicitado el beneficio, puedes retirar tu solicitud y dejar de recibir pagos. Para hacerlo, deberás devolver todo el dinero que ya has recibido, incluidos los beneficios conyugales y las primas de Medicare. Una vez hecho esto, podrás presentar una nueva solicitud más adelante, lo que aumentará la cantidad de tu beneficio.
¿Existe algo más que pueda saber?
Otra opción es suspender los beneficios, lo que resulta más accesible para la mayoría de las personas. Una vez que llegues a la FRA, puedes pausar tus pagos hasta los 70 años. Al reanudar los beneficios, recibirás un monto ajustado.
Este número no será tan alto como si hubieras retrasado la solicitud desde el principio, pero será mucho mayor que si no hubieras suspendido los pagos. De esta forma, conocer y comprender estos desconocidos pasos del Seguro Social puede marcar una gran diferencia en tu calidad de vida durante la jubilación. Al tomar decisiones informadas, maximizas tus fondos mensuales.