Retrasar tu jubilación más allá de la edad plena puede traer beneficios económicos significativos dentro del sistema del Seguro Social en Estados Unidos. Mientras que muchos optan por jubilarse a los 62 o al alcanzar la edad completa (entre los 66 y 67 años, según el año de nacimiento), quienes deciden esperar hasta los 70 años pueden recibir pagos mensuales considerablemente más altos. Esta estrategia, conocida como jubilación tardía, es especialmente útil para quienes gozan de buena salud, desean seguir trabajando o buscan una mayor seguridad financiera a largo plazo.
Por cada año que pospones tu jubilación después de la edad plena, tu beneficio mensual aumenta alrededor del 8%, hasta llegar al tope a los 70 años. Es decir, si tu edad de jubilación completa es 67 y decides esperar hasta los 70, podrías recibir hasta un 24% más cada mes. Este incremento es permanente y se ajusta año a año con la inflación (cost-of-living adjustment). Sin embargo, más allá de los beneficios económicos, es importante evaluar otros factores como tu salud, esperanza de vida, necesidades familiares y fuentes de ingreso adicionales.
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Lo que debes considerar antes de optar por una jubilación tardía
- Aumento del beneficio: Retrasar tu solicitud aumenta el pago mensual de forma permanente. Esto es ideal si esperas vivir muchos años o si no necesitas los ingresos inmediatamente.
- Impacto en cónyuges: Si falleces, tu cónyuge podría recibir un beneficio de sobreviviente más alto si tú optaste por una jubilación tardía.
- Flexibilidad laboral: Puedes seguir trabajando sin límite de ingresos una vez alcanzada la edad completa, sin que eso afecte tus beneficios.
- No esperes más allá de los 70: A partir de esa edad, no se otorgan más aumentos por retraso, por lo que no tiene sentido postergar más allá.
- Complementos financieros: Evalúa si tienes otras fuentes de ingreso que te permitan cubrir tus gastos mientras postergas el Seguro Social.
Tomar una decisión informada sobre cuándo jubilarte puede marcar una gran diferencia en tu estabilidad financiera durante la vejez. Considerar la jubilación tardía es una estrategia inteligente para quienes desean maximizar sus beneficios y no tienen una necesidad económica urgente.
