La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) ha iniciado una investigación sobre la seguridad de los tampones después de que un informe revelara la presencia de metales tóxicos, incluidos arsénico, mercurio y plomo, en más de una docena de marcas.
Aunque el estudio confirmó la existencia de estos metales en los productos, no se ha determinado si representan un peligro para la salud de las usuarias. Esta noticia ha generado gran preocupación entre las mujeres estadounidenses, ya que aproximadamente el 80% de ellas utilizan tampones durante la menstruación.
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— U.S. FDA en Español (@FDAenEspanol) August 27, 2024
¿Qué dice la FDA sobre los tampones?
En su comunicado, la FDA explicó que todos los productos deben pasar rigurosas pruebas de biocompatibilidad antes de ser autorizados para su venta. Sin embargo, el informe en cuestión no evaluó si los metales presentes en los tampones se liberan durante su uso ni si estos pueden ser absorbidos por el cuerpo a través del revestimiento vaginal. La FDA también señaló que estos productos están sujetos a revisiones continuas y pruebas regulares para garantizar su seguridad.
La nueva investigación: ¿qué sigue para los tampones?
La FDA ha anunciado una nueva fase de investigación para determinar si los tampones liberan metales durante el uso cotidiano. Según detalló la agencia, este estudio simulará las condiciones normales de uso y medirá la cantidad de metales que podrían desprenderse, evaluando así los posibles riesgos para la salud.
Específicamente, se enfocarán en cómo los metales podrían interactuar con el cuerpo y si existe alguna forma de absorción en el torrente sanguíneo. Además de la investigación interna, la FDA está colaborando con estudios independientes para obtener resultados más completos.
Este esfuerzo tiene como objetivo tranquilizar a las consumidoras, quienes han expresado una creciente preocupación en redes sociales sobre la posible exposición a sustancias peligrosas. Grupos de defensa de los derechos de las mujeres también han comenzado a exigir mayor transparencia por parte de los fabricantes.
Al finalizar la investigación, la FDA se ha comprometido a comunicar los resultados y continuar monitoreando la seguridad de estos productos como parte de su enfoque integral sobre dispositivos médicos. La agencia enfatizó que mantendrá una estricta vigilancia sobre los tampones y cualquier otro dispositivo que pueda representar un riesgo para la salud.
Créditos vídeo: YouTube | @US_FDA.