Este es el costo de solicitar una ambulancia en Estados Unidos por emergencia

Solicitar una ambulancia en Estados Unidos no es un asunto trivial. El costo puede alcanzar los U$D 2 500, un monto que resulta increíble para muchos extranjeros y residentes locales. Esta cifra es parte de un sistema de salud donde los costos elevados son la norma y las sorpresas desagradables, frecuentes.

La indignación de quienes se enfrentan a estos precios refleja una realidad que afecta a millones de ciudadanos, quienes deben balancear su necesidad de atención médica con sus posibilidades económicas.

Inaccesibilidad y costos elevados

La sanidad en Estados Unidos es notoriamente costosa y muchas veces inaccesible para una gran parte de la población. Casi 47 millones de ciudadanos carecen de cualquier tipo de póliza de seguro médico, lo que les deja expuestos a facturas exorbitantes en caso de necesitar atención.

En comparación, los países con sistemas de salud públicos, como el Reino Unido o España, ofrecen servicios más accesibles y económicos, lo que destaca la disparidad en la atención sanitaria.

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Ejemplos de gastos exorbitantes

Los costos elevados no se limitan a las ambulancias. Otros ejemplos alarmantes incluyen  U$D 250 por un inhalador y  U$D 70 000  por un bypass coronario. Incluso el costo de una noche en el hospital puede ascender a  U$D 2,000. Estos precios varían según el hospital y la aseguradora, dependiendo de la oferta, demanda y la reputación de los médicos involucrados.

Uno de los casos más notables es el de la 'EpiPen', un autoinyector de epinefrina esencial para personas con alergias severas. En 2016, su precio aumentó un 400%, sin que esto afectara sus ventas debido al monopolio en el mercado y la necesidad crítica del producto. Esto demuestra cómo el control de precios y la falta de competencia pueden impactar directamente en los pacientes.

A pesar de estos elevados costos para los pacientes, Estados Unidos no es un país que gaste poco en sanidad. Se estima que su inversión alcanza el 18% del PIB, el doble que países como España. Sin embargo, un informe de Harvard y la London School of Economics señala que el alto costo se debe a la gran cantidad y precio de las pruebas de diagnóstico, el complejo sistema administrativo y los elevados salarios de los médicos.