Traer un felino peludo a tu vida ofrece innumerables beneficios, como compañía, menor estrés y ansiedad, y la oportunidad de desarrollar hábitos saludables. Sin embargo, estos beneficios tienen un precio y pesan más aún si te encuentras en Estados Unidos.
Según la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (ASPCA, por sus siglas en inglés), los costos del primer año de tener un gato promedian U$D 455, mientras que los costos continuos promedian U$D 1 149 por año. Estos gastos incluyen cosas como atención médica, alimentos, juguetes y seguro para mascotas.
Adopción vs. compra
Los precios de adopción para felinos suelen oscilar entre U$D 30 y U$D 200, dependiendo de factores como la ubicación, la raza, el tiempo en el refugio y la edad. Los gatitos suelen costar más que los gatos adultos. Algunos refugios pueden alcanzar su capacidad y ofrecer fines de semana gratuitos o con descuento, lo que brinda la oportunidad de reducir algunos de los costos iniciales estándar. Los gatos adoptados de agencias de rescate suelen tener las vacunas actualizadas y ya han sido esterilizados o castrados, lo que representa un ahorro significativo.
Por otro lado, si decides trabajar con un criador para comprar un gato, puedes esperar pagar entre U$D 300 y U$D 1 000, dependiendo de la ubicación y la raza. Algunas razas más raras pueden costar incluso más: los persas promedian entre U$D 1 500 y U$D 5 500, mientras que los gatitos bengalíes de alta gama pueden costar hasta U$D 25 000.
Créditos video: Instagram | @aspca
Costos mensuales
Según la ASPCA, los costos mensuales para gatos promedian U$D 53 e incluyen atención veterinaria de rutina, comida y golosinas, arena sanitaria y juguetes seguros para ayudar con la actividad física y la estimulación mental. Antes de invertir en un nuevo gatito, es importante considerar estos costos mensuales fijos en los que probablemente incurrirás.
Además de los gastos básicos, los gastos mensuales opcionales pueden incluir cosas como rascadores, hamacas, una fuente de agua o juguetes adicionales. Estos artículos no son esenciales, pero pueden mejorar la calidad de vida de tu mascota.
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