Durante décadas, la estrecha relación entre Popeye y las espinacas ha sido un símbolo de fortaleza y vitalidad en la cultura popular. Sin embargo, un error de cálculo cometido por el químico alemán Erich von Wolf en 1870, cambió para siempre la percepción sobre esta verdura y el personaje animado.
Von Wolf atribuyó incorrectamente a las espinacas diez veces más contenido de hierro del que realmente tenían, otorgando a Popeye una fuerza sobrehumana basada en un poder infundado.
A pesar del falso mito perpetuado por décadas, las espinacas siguen siendo una opción nutricionalmente beneficiosa en la dieta diaria. Rica en vitaminas A, C y K, folato y antioxidantes, esta verdura también ofrece un alto contenido de fibra y un aporte calórico moderado. Aunque su contenido de hierro es menor de lo que se creía originalmente, las espinacas son una adición saludable a una dieta equilibrada.
Cocidas al vapor, salteadas o añadidas a una variedad de platos, las espinacas ofrecen versatilidad en la cocina y son una opción recomendable para promover la salud y el bienestar. Más allá del mito de Popeye, el Día Mundial de la Espinaca nos recuerda la importancia de incorporar este vegetal en nuestra alimentación para mantener un estilo de vida saludable y equilibrado.