Si tu juegas bonito, tal vez no te alcance para conseguir objetivos. Juventus fue el villano de la historia con 2 goles argentinos en Wembley.
Fueron 5 minutos de desconcentración, fue una ráfaga argentina la que sacó al Tottenham Hotspur de los cuartos de final de la Champions League. Juventus padeció gran parte del encuentro ante una de las mejores expresiones del fútbol inglés, sin embargo la jerarquía y la mística es algo que forjó la 'Vieja Señora' en sus 120 años de historia y eso lo sacó vivo de Londres.
En el terreno de Wembley, la 'catedral del fútbol', Tottenham disfrutaba y Juventus apelaba al juego fuerte para cortar la circulación de Heung-Min Son y Delle Alli. El árbitro del partido, el polaco Szymon Marciniak, dejó pegar mucho, se 'comió' un par de penales y le perdonó la vida a Andrea Barzagli por un pisotón con intención de dañar al surcoreano Son. Tras el 1-0 de los Spurs en el primer tiempo, nada hacía pensar en una reacción de los italianos, pero olvidamos el detalle que ayer Real Madrid refrescó en nuestras memorias: los grandes son grandes y no puedes subestimarlos.
El inicio del segundo tiempo tuvo al Tottenham desplegando tacos, lujos y un juego vertical que ha convencido a los entendidos. Esa manera de generar fue 'disgustando' a la 'Vieja Señora', que con la sangre en el ojo, también apoyado en un par de cambios magistrales de Massimilliano Allegri (juego por las bandas con Stephan Lichtsteiner y Kwadwo Asamoah), fue adelante por el gol.
El criticado Gonzalo Higuaín demostró los millones que vale y con un gol a los 64' mandó un mensaje al equipo, al mundo y a los ingleses. Al grande se le respeta y las 2 'Orejonas' no están por las puras.
No podemos indicar que Tottenham le faltó el respeto a Juventus, los Spurs juegan así y en Italia sacó un empate merecido. Los 'Bianconeri' no frenaron el camino, aprovecharon el efecto del golpe y con otra acción iluminada de Higuaín, fue Paulo Dybala el hombre de la estocada final, aquella que va al corazón y aquella que prueba que el fútbol es un deporte elitista, donde cuesta mucho entrar a la fiesta de los 'grandes'.
Los amantes del buen fútbol estamos dolidos al ver la caída del Tottenham, es una de esas pruebas que en el fútbol no siempre gana el que mejor hace las cosas en el campo. El deporte más lindo del mundo, así le dicen.
El proyecto del Tottenham es conmovedor. Sin gastar los millones que despilfarran algunas veces Chelsea, Manchester City, Manchester United o Arsenal, ha conformado un equipo práctico que compite en la Premier y no lo hace un par de temporadas atrás. Los Spurs descubrieron que el negocio es comprar a bajo costo y potenciar para luego vender, con esa fórmula podemos ver realidades como Harry Kane, Christian Eriksen, Delle Alli, Heung-Min Son, Davinson Sánchez y Mousa Dembélé.
Es difícil pasar de ser un buen equipo a uno grande. Ese título te lo dan las copas, batallas épicas en un campo de juego y mucha jerarquía transmitida de generación en generación. Los Spurs son tradicionales en Inglaterra, pero todavía le falta para dejar la pubertad futbolística y ser un cuadro copero de Europa.

Gianluigi Buffon mantiene vivo el sueño de ganar la primera Champions League de su carrera.Fuente: AFP

Tottenham Hotspur nunca ha disputado una final de Champions League a diferencia de su rival, Arsenal.Fuente: AFP