Lectura rigurosa y cuestionamiento justo
Muchos atestiguamos habernos encontrado ante interlocutores que, sin mayor empacho, tachan a autores que no han leído en lo más mínimo, o que, simplemente, asumen las críticas de otros, difundidas sin rigor por las innumerables plataformas digitales. El peligroso efecto de esta práctica es que extienden los prejuicios y se alienta la censura desde la ignorancia. En ese sentido, si queremos cuestionar las ideas de un autor, lo justo es que leamos sus obras con objetiva disciplina.