La familia Quiroz Santana volvió a la vivienda donde se encerró para esperar un supuesto 'fin del mundo', pero esta vez sin los menores de edad y el ciudadano nepalí.
La secta religiosa que esperaba el ‘fin del mundo’ en el cuarto de una vivienda en Chorrillos volvió a encerrarse en lugar, pero esta vez sin los tres menores de edad que fueron rescatados por la policía y sin el ciudadano nepalí que también formaba parte de ese grupo, así lo pudo comprobar un equipo de RPP Noticias que acudió al inmueble ubicado en la urbanización Santa Leonor.
Regresan al lugar. El resto de la familia Quiroz Santana aún permanece encerrada en la misma vivienda, no quieren salir ni dar declaraciones a la prensa. En la puerta de la casa han colocado clavados cruces y una imagen de la Virgen María. Los vecinos están preocupados por la situación y la policía regresó al lugar para inspeccionar el inmueble.
Situación de los menores. De los tres menores de edad, dos de ellos de 14 y 17 años fueron entregados a su padre, porque la madre también integraba la secta religiosa. En tanto, el bebé de 8 meses de nacido fue llevado al Inabif. Además, según información de la policía, el ciudadano nepalí se encuentra en la sede de migraciones para ser deportado a su país por su estadía ilegal en el Perú.
La denuncia. La denuncia fue hecha por abandono de personas en peligro debido a que los menores de edad se encontraban en el lugar y, al parecer, con signos de desnutrición por la dieta que llevaba la familia Quiroz Santana.
¿El fin del mundo? El miércoles, en compañía de un fiscal, la Policía allanó la vivienda en la urbanización Santa Leonor de Chorrillos, donde 11 adultos de una secta religiosa y una mascota estaban encerrados esperando un supuesto ‘el fin del mundo’ que, según ellos, ocurriría el lunes 22 de agosto.
Comparte esta noticia