La determinación se asumió ante el desorden originado por la masiva afluencia de aficionados que llegó hasta el estadio de la UNSA para adquirir entradas para el evento deportivo.
La venta de entradas para el partido final del torneo descentralizado fue suspendida en horas de la tarde en el estadio de la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) por los disturbios registrados.
Las dos únicas ventanillas fueron cerradas pasadas las 16:00 horas, ante la masiva e incontrolable afluencia de miles de ciudadanos que pugnaban por adquirir entradas para apreciar el evento deportivo.
Un tanque de agua de la policía nacional, conocido como ‘rochabús’ llegó hasta el lugar para tratar de disuadir a la turba, que a su vez fue exhortada, por un contingente policial a mantener el orden.
Es desde el último sábado, que aficionados forman largas colas para adquirir un boleto para la final del torneo descentralizado, a jugarse este miércoles entre el FBC Melgar y Sporting Cristal.
Comparte esta noticia