De acuerdo a las cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cáncer de mama es el más común entre las mujeres en todo el mundo y está aumentando en los países en desarrollo, donde la mayoría de los casos se diagnostican en fases avanzadas. Por ello, es importante entender todo el proceso de dicha enfermedad.A partir de los 40 años de edad en adelante, las mujeres deben realizarse mamografías regularmente y si presenta factores de alto riesgo para cáncer de mama (como familiares directos que lo hayan desarrollado), el especialista puede pedirlas antes de esta edad para prevenir y detectarlo de forma temprana. Aunque existen algunos factores que no podemos modificar y que elevan el riesgo de desarrollar este tipo de cáncer (edad, familiares con cáncer de mama o la edad de la primera menstruación), hay algunos hábitos que sí puedes cambiar para reducir las posibilidades:Medicación. Si vas a iniciar un tratamiento hormonal o a consumir pastillas anticonceptivas, conversa con tu ginecólogo primero para conocer todos los riesgos y verificar si efectivamente es el mejor procedimiento para ti de acuerdo a tu edad, peso, así como antecedentes familiares y médicos.Lactancia. Se conoce que la lactancia materna disminuye el riesgo de desarrollar cáncer de mama por ello, si estás planeando tener hijos o si los acabas de tener, decídete por amamantarlo y, de ser posible, extiéndelo hasta el año y medio o dos años de tu bebé.Ejercicio físico. Siempre será recomendable realizarlo para cuidar la salud y alejar otros males.Peso. Mantener un peso estable a lo largo de la vida ayuda a organizar correctamente las funciones internas de nuestro cuerpo. Visita un nutricionista para verificar tu peso ideal y si no estás en él, sigue sus consejos para lograrlo.Dieta. Es importante todos los días incluir en nuestra dieta frutas y verduras, así como cantidades adecuadas de agua.Radiaciones y químicos. Si no es médicamente necesario, limita tu exposición a radiaciones en pruebas por imágenes (rayos X, tomografías, etc.) o a sustancias químicas que puedan interferir con el buen funcionamiento de tu organismo.Si sigues estas recomendaciones tienes una buena base para el cuidado de tu salud. Sin embargo, si deseas conocer más modos de prevención o exámenes específicos, sobre todo si tienes antecedentes familiares, debes visitar regularmente a tu médico para recibir la orientación adecuada.