El director de la Comisión Nacional de Antidopaje, Víctor Carpio, dio a entender que la FPF tomó una buena decisión al no participar en el caso del 'Depredador'.
Al fin y el cabo, la Federación Peruana de Fútbol hizo bien en no intervenir en el caso de Paolo Guerrero con el TAS. Víctor Carpio, director de la CONAD (Comisión Nacional de Antidopaje), dio a conocer en 'Fútbol Como Cancha' de RPP Noticias que ambas partes podrían haber sido perjudicadas si es que la FPF participaba directamente de este asunto.
"La FPF está inscrita a la FIFA, por lo que también está sometida a la WADA. Han actuado de manera inteligente en este caso, donde no han mostrado ninguna facilidad hacia Guerrero. Si lo haría, entraría en lo que es asociación prohibida, que podría terminar perjudicando al deportista y es lo más preocupante. Si hubieran intervenido, le pudieron haber duplicado el tiempo del castigo y a las personas involucradas también se les inicia un proceso de dopaje y también pueden recibir sanciones", sostuvo Carpio.
Asimismo, si bien reconoció que ha habido ayuda hacia el delantero de 34 años por parte de la institución presidida por Edwin Oviedo, esta ha sido básicamente anímica y no material.
"El apoyo a Paolo ha sido emocional pero no de recursos, porque sino habría violado la normatividad. El gobierno de Perú no va a participar de manera activa, Heresi fue muy atinado a decir que no iba a haber una participación directa. Por su parte, la WADA tiene la potestad de apelar cualquier tipo de sanción que vea que es injusta, ya sea muy alta o baja para la interpretación jurídica del código", sentenció Carpio.
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