El lenguaje puede combinarse de mil maneras. Y siempre hay una mejor forma para decir lo que se quiere sin causar rechazo en el otro. Pero en los diálogos como el que se da en Conga o en los clubes de fútbol, lo que dice cualquiera de las partes del "otro" es para desprestigia y destruir. ¿Por qué no se da un diálogo creativo y productivo? Por la soberbia antigua y la de ahora, el narcisismo infantil.
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