Protestante y compañeros exigen a Gobierno aumento de sueldos. A esta manifestación se suma la de los trabajadores del Poder Judicial.
La sangre brotaba a través de la aguja de una jeringa pinchada en su antebrazo derecho. Así protestó el antropólogo forense, Manuel Grados, durante una movilización que él y sus compañeros del Ministerio Público realizaron en la plaza de armas de Trujillo como parte de la huelga que acatan desde hace 21 días.
El huelguista intentó llamar la atención de las autoridades del Gobierno central para que tomen en cuenta sus pedidos que es aumentar los sueldos y el presupuesto para este sector.
Los trabajadores administrativos del Poder Judiciales no se quedaron atrás. Ellos también recorrieron el centro de la ciudad para exigir al Ejecutivo un similar pliego de reclamos.
La movilización interrumpió momentáneamente el tránsito de los vehículos en las inmediaciones de la plaza de armas de la capital liberteña.
Comparte esta noticia