Gustavo Enrique Viera Olano aseguró su inocencia y acusó a un grupo de agentes del INPE de torturarlo.
Después de haber estado preso por 80 días en el penal de Chiclayo, por el asesinato de la joven universitaria, Brigitte Silva Valencia, el procesado Gustavo Enrique Viera Olano (34) fue puesto en libertad este jueves y aseguró su inocencia.
“Yo no he tenido nada que ver con los hechos, no he participado, ni conozco a los culpables que la policía ha detenido. Desde el primer día fui torturado en el penal, me pasaron electricidad, me golpearon las costillas, yo clamaba mi inocencia, pero nadie me escuchó”, dijo.
Sobre el hallazgo del celular en su poder, comentó que si bien se encontró el equipo cuando salía de su trabajo, acudió a la policía y fue allí cuando de manera irresponsable el chofer de la combi, lo inculpó malintencionadamente.
“Por la presión me inculparon, todos decían cadena perpetua, 25 años, 30 años, gracias a Dios cayeron los verdaderos culpables. Incluso ese día que me regresaron en la noche a la escena del crimen, un policía de la Divincri me dijo tú no has sido, son otros y hasta la misma gente decía que yo no tenía, nada que ver, pero la fiscal se ensañó conmigo", indicó.
Maltratos. Acusó a la Técnica Betty y dos técnicos más del Inpe de apellidos Maldonado y Teken de haberlo golpeado de manera abusiva hasta las once de la noche. Sobre este tema ya existe una denuncia contra los agentes.
Denunciará a fiscal. También dijo que denunciará a la fiscal que pidió su prisión preventiva, porque fue juzgado injustamente, pese a que presentó las pruebas suficientes para demostrar su inocencia.
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