Solemos escuchar sobre la trata de personas y asociarla únicamente a otros delitos como la explotación sexual o los trabajos forzados, pero en realidad comprende mucho más que eso. Conocer realmente a qué se refiere, cuáles son las formas de captación de las víctimas y qué consecuencias deja en ellas es fundamental para aprender a reconocer este delito y evitar que más personas caigan en esta forma de explotación humana.
Alrededor de 2,4 millones de personas en el mundo son víctimas de la trata en un momento dado, según estimaciones de la OIT (2005)
¿QUÉ ES LA TRATA DE PERSONAS?
La trata de personas es un delito que comprende conductas como la captación, el transporte, el traslado, la acogida, la recepción y la retención de personas recurriendo a la amenaza, engaño o al uso de la fuerza u otras formas de coacción con fines de explotación, según el artículo 153 de nuestro Código Penal.
Conoce más de la trata de personas en el Perú mirando el siguiente video elaborado por CHS Alternativo:
Los tratantes pueden recurrir a diferentes medios para captar a sus víctimas e incluso para lograr su consentimiento, por ejemplo, suelen usar la violencia, amenazarla, privarla de su libertad, dar o recibir pagos o beneficios, caer en fraude o engaño y hasta aplicar el abuso de poder o sacar provecho de una situación de vulnerabilidad. De acuerdo con cifras de Ministerio del Interior, los principales medios de captación incluyen falsas ofertas de empleo, la seducción, las falsas identidades por Internet y redes sociales, y el padrinazgo.
¿Para qué son captadas las víctimas? El principal propósito es explotar a las víctimas para obtener ganancia económica, por lo que estas son obligadas a realizar actividades en muy malas condiciones, usualmente en locales clandestinos o informales, según información del Ministerio del Interior (2010) expresada en el documento "Trata de personas y responsabilidades estatales en la región de Piura" de la Defensoría del Pueblo. Las personas que son víctimas de este delito pueden sufrir diversos tipos de explotación: desde trabajos forzados y explotación sexual, hasta esclavitud, servidumbre, mendicidad o extracción de órganos.
De cada 10 víctimas detectadas a nivel mundial, 5 eran mujeres adultas y 2 eran niñas – Reporte UNODC
¿CUÁL ES EL PERFIL DE LAS PRINCIPALES VÍCTIMAS DE TRATA DE PERSONAS?
Si bien cualquier persona puede ser afectada por este delito (niños, jóvenes, adultos u hombres), las estadísticas de denuncias señalan que en el Perú las más afectadas son las mujeres, quienes representan el 83 % del total de víctimas, de acuerdo con datos de la Estadística FISTRAP 2021 del Ministerio Público.
La oferta laboral es el principal medio de captación de víctimas, según las denuncias - INEI
Los datos reportados por la Policía Nacional del Perú muestran una concentración de víctimas mujeres: el 54 % entre 18 y 29 años, seguida del 28.8 % entre 12 y 17 años y 11.1 % entre 30 y 59 años; sin embargo, también es importante mencionar a la población de varones jóvenes en contextos de economías ilícitas como la minería ilegal. Mientras que ellos suelen ser captados para fines como el trabajo forzoso, las mujeres suelen ser captadas con fines de explotación sexual.
Sin duda, las personas en situación de vulnerabilidad son las más propensas a ser víctimas. Sin embargo, según la Defensoría del Pueblo, también pueden contribuir al delito de trata de personas factores estructurales como la pobreza, la falta de educación y el desempleo.
Sumado a esto, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) ha señalado que algunos factores individuales que aumentan el riesgo de ser víctimas de trata de personas son la baja autoestima, la inestabilidad emocional y la dificultad de autocontrol. Junto a esto, contextos como el bajo nivel socioeconómico, la desigualdad social, el acoso sexual y el bajo nivel de conocimiento de este delito incrementan la situación de riesgo.
De acuerdo con Ana Ladera, coordinadora del Centro de Atención Legal y Psicosocial de CHS Alternativo, la familia también juega un rol muy importante en este delito, sobre todo los casos de violencia intrafamiliar o las agresiones en casa o el colegio. “Hemos identificado que el 90 % de las víctimas proviene de hogares disfuncionales. Muchas veces la relación de comunicación en el hogar es autoritaria. Además, la violencia es otra forma que condiciona a la persona a huir de casa o a no confiar en adultos”, comenta a RPP.
Por su parte, Andrea Querol, presidenta de CHS Alternativo, hace énfasis en la urgencia de escuchar a las víctimas para tomar enfoques adecuados que eviten su revictimización. “Ellas perciben que la violencia se presenta tanto en la interacción que tienen con sus victimarios, como en la interacción que tienen con el Estado y luego con la ciudadanía, lo que les genera impacto y dolor en el proceso de recuperación”, explica.
En esa línea, la especialista comenta que existe retractación y resistencia por denunciar por parte de las víctimas por miedo de las amenazas o la sensación de colusión que pueden dar las autoridades. "Aquí el enfoque de género es urgente y debe aplicarse de manera transversal considerando el perfil distinto de las víctimas”, sostiene.
Testimonios de las víctimas
Escuchar a las víctimas es fundamental para brindarles el soporte adecuado en cada etapa y entender mejor la forma en que este delito se produce.
El libro “Buscando Justicia: Trata de personas, violencia y explotación: 40 testimonios”, de Andrea Querol, así como la publicación de ECPAT Internacional titulada “Explotación y Abuso sexual de niñas, niños y adolescentes en línea: perspectiva de sobrevivientes en Perú”, recogen algunos testimonios de víctimas de trata de personas. A continuación, compartimos algunos:
Sobre un caso de escape del tratante
"Fue por mí misma. [...] Recuerdo que salí con varias personas, varias chicas. Caminamos mucho, teníamos miedo, personalmente me quería morir. Pero también como hay gente mala, también hay gente que se puso de nuestro lado y nos pudo ayudar a salir de eso, ¿no? Caminamos mucho y encontramos un camión cisterna, si no me equivoco. Fue creo que una aventura porque me tocó ir arriba, agarrándome de esos fierros para no caerme hacia lo que estaba: el río o el pavimento, ¿no? Y fue esa la manera en que salimos del lugar" (P27, 2019)
Sobre la asistencia a las víctimas
“Me hubiese ayudado tener un acompañamiento psicológico continuo para cubrir el vacío y dolor que me dejó la situación [...] Porque si te han hecho daño, hay un hueco que queda, no se va a llenar de la noche a la mañana por arte de magia [...]” (VoS-PE-04)
Sobre las penas
“Deben haber penas más fuertes y mejores mecanismos o más efectivos para capturar a las personas. Las autoridades deben tomar más cartas en el asunto para que esto no pase.” (VoS-PE-01)
Sobre la prevención
“La explotación sexual de niños niñas y adolescentes, va más allá de un delito, mas allá de un aspecto psicológico, es atacar el problema de raíz se debe reeducar a la familia por generaciones, concientizar, sensibilizar, poner en práctica desde muy niños, con un enfoque preventivo.”
Debemos estar alerta a los cambios de conducta de la posible víctima: percatarnos si se aísla, qué lugares visita y con quiénes se relaciona
SEÑALES DE ALERTA PARA IDENTIFICAR A POSIBLES VÍCTIMAS DE TRATA
Es importante estar alerta a los cambios que se dan en la persona afectada. Como enfatiza Ladera, “toda persona que es captada presenta un cambio de conducta: se aísla, ya no se comunica con la familia e incluso ya no le tiene confianza; esto se debe también a las indicaciones que dan los tratantes, por ejemplo, ‘no comentes nada porque si no, no va a resultar el trabajo’, en el caso de una captación por oferta laboral”.
Así, el tratante busca ganar confianza para luego aislar a la víctima de su entorno más cercano y ponerla en una situación de desprotección. Por eso, es importante que los amigos y familiares de una posible víctima estén siempre alertas y pendientes de los lugares que visita y con quiénes se relaciona, especialmente con las amistades que recién conoce: de dónde provienen, a qué se dedican, etc.
Hay que tener en cuenta que muchas víctimas son incapaces de dejar sus lugares de trabajo y no son libres para contactar a sus familias. CHS Alternativo comenta que algunas de las principales señales que podrían revelar que una persona es víctima de este delito son las siguientes:
- Trabajan largas horas en condiciones no adecuadas.
- No pueden comunicarse libremente con sus familiares o amigos.
- No tienen documentos personales, estos han sido retenidos o son falsos.
- No reciben una remuneración bajo las condiciones prometidas.
Además, agrega que en el caso de niñas o niños que han sido víctimas, algunas de las señales más recurrentes son estas:
- Se alejan de sus amigos o familiares o no pueden comunicarse con ellos.
- Tienen una conducta muy sumisa.
- Presentan desnutrición o deshidratación.
- Se muestran desaliñados, con ansiedad y pueden tener tendencias suicidas.
Ya que las falsas ofertas laborales son el principal medio de captación de víctimas, CHS Alternativo brinda algunos consejos para identificar una falsa oferta laboral: no hay información sobre la persona o “empresa” que ofrece el puesto, quienes contactan tienen perfiles falsos o dudosos en redes sociales, piden documentos de identidad e información personal u ofrecen una excesiva cantidad de dinero en comparación a otros anuncios. Puedes encontrar más indicadores de trata de personas aquí.
¿CÓMO Y DÓNDE DENUNCIAR UN CASO DE TRATA DE PERSONAS?
Ladera comenta que cuando el agresor toma confianza y logra que la persona se aleje de su entorno, le pide salir de su espacio seguro con engaños, mentiras, propuestas interesantes o atractivas. Una vez que la retira, la víctima desaparece y muchas de las personas o familias no se percatan de este hecho y esperan que pase un día o muchas horas para dar conocimiento a las autoridades.
“Muchos dicen ‘esperemos 24 o 48 horas’. En Perú no aplica esa ley. Apenas tú te des cuenta de la desaparición de un familiar, amigo o conocido inmediatamente puedes colocar la denuncia para que las autoridades pongan la alerta para la búsqueda y para la prevención de que esta persona sea trasladada a otro lugar”, agrega.
Las horas son importantes en el delito de trata, pues en cuestión de minutos la víctima puede pasar de un lugar a otro. Por eso, la especialista señala que las denuncias por desaparición son el primer paso para lograr que este delito no se concrete bajo las intenciones de los tratantes o agresores. Según el Código Penal peruano, la pena por trata de personas puede variar entre un mínimo de 8 y hasta más de 25 años de pena privativa de libertad, según agravantes.
Casi medio millón de peruanas y peruanos se reconocen como víctimas de trata de personas, según un estudio del IEP por encargo de CHS Alternativo
Para denunciar, las personas tienen dos opciones: hacerlo por vía telefónica llamando a la línea 100 del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) o llamando a la línea 1818 del Ministerio del Interior (Mininter). La otra opción es hacerlo presencialmente en la comisaría o Fiscalía más cercana.
Si la denuncia es presencial, la persona debe pedir copia de esta y solicitar que los datos de la víctima se suban a la página de peruanos desaparecidos en Perú para que circule a nivel nacional. Además, cualquier ciudadano puede comunicarse con organizaciones no gubernamentales como CHS Alternativo para pedir orientación, asesoría y apoyo para poner una denuncia.
El 85 % de encuestados consideró que la trata de personas es un problema que requiere atención urgente del Estado, por encima de otras problemáticas como el narcotráfico y la minería ilegal, según el estudio del IEP por encargo de CHS Alternativo
¿Qué dificultades existen actualmente en la lucha contra este delito?
Para Ricardo Valdés, director de CHS Alternativo, uno de los principales problemas es que nuestro país no cuenta con un registro único de víctimas de trata de personas ni de cifras de denuncias, pues las diversas instituciones del Estado que trabajan en este tema, como el Ministerio Público y el Ministerio del Interior (Policía Nacional), manejan información diferente, lo que impacta en las formas de prevención, atención y sanción de este delito.
La necesidad de un registro único se ve claramente reflejada en la reciente encuesta de percepciones sobre la trata de personas realizada por el Instituto de Estudios Peruanos (IEP) por encargo de CHS Alternativo. Este estudio revela que al menos 497 mil peruanas y peruanos que saben en qué consiste la trata de personas se reconocen cómo víctimas de ese delito en algún momento de sus vidas. La cifra es abrumadora y contrasta profundamente con las denuncias registradas por el Ministerio Público, que en los últimos siete años contabilizó apenas poco más de 8,800 casos.
Otro de los problemas es el escaso presupuesto: el plan nacional contra la trata de personas que estuvo vigente hasta el año 2021 contaba con apenas 20 centavos de sol para financiar la persecución, protección de víctimas y prevención del delito por persona al año. Así también, se trata de un delito con alta impunidad, pues solo 7 de cada 100 casos de trata de personas tiene sentencia condenatoria.
Finalmente, existe un desconocimiento en la población sobre lo que es y lo que abarca el delito de trata de personas. La encuesta del IEP reveló que, aunque el 77 % de personas encuestadas decía saber qué es la trata de personas, de ese total solo el 19 % dio una definición correcta. El desconocimiento es mayor en los sectores rurales, entre los hombres y en sectores socioeconómicos más pobres. Todo esto impacta en la denuncia y en cómo se sanciona este delito de alta impunidad. Puedes revisar los resultados de la encuesta aquí.
La trata de personas causa daños y traumas psicológicos permanentes como depresión, ansiedad, estrés postraumático y síndrome de Estocolmo
¿QUÉ CONSECUENCIAS DEJA LA TRATA DE PERSONAS EN LA SALUD?
Este delito causa un gran impacto negativo en la salud y vida de las víctimas, tanto a nivel físico como psicológico y emocional. La Organización Mundial de la Salud (OMS) detalla que en cada etapa de la cadena de trata de personas, las víctimas pueden afrontar abuso psicológico, físico o sexual, así como uso forzado de drogas o alcohol, restricciones sociales, manipulación emocional, entre otros aspectos que terminan afectando su salud.
Por ejemplo, cuando se trata de trabajo forzado o explotación laboral, dicha entidad señala que las víctimas se exponen a saneamiento inadecuado, horas de trabajo prolongadas, peligros químicos, calor o frío extremos, entre otros puntos que pueden causar problemas físicos como agotamiento, deshidratación, lesiones, problemas respiratorios o infecciones cutáneas. En el caso de explotación o abuso sexual también se exponen a contraer enfermedades de transmisión sexual.
La trata de personas también causa daños y traumas psicológicos permanentes como depresión, ansiedad, estrés postraumático y síndrome de Estocolmo, problemas que pueden llevar toda una vida para ser tratados y superados, de acuerdo con CHS Alternativo. Adicionalmente, trae consigo problemas sociales para las víctimas como la estigmatización, el rechazo social o problemas de dependencia que impiden su desarrollo integral.
Si conoces un caso, ¡denúncialo!
Si has identificado alguna de las señales de alerta en alguna persona o familiar, o si conoces un caso de trata de personas, denúnciala a la Línea 1818, a la Línea 100 o en la comisaría o Fiscalía más cercana.
Debido a que en nuestro país muchas de las personas víctimas de trata desconocen cómo denunciar estos casos, así como las vías para solicitar ayuda y lograr justicia, CHS Alternativo, con el apoyo de USAID, ha elaborado la “Guía amigable para sobrevivientes de trata de personas”, que permite guiar a las personas que quieren denunciar este delito. Puedes acceder a ella hacienco clic sobre el nombre o haciendo clic aquí.
La trata de personas es explotación humana. Desde CHS Alternativo, USAID y RPP, la combatimos.
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