En los últimos meses, en paralelo a su enfermedad, había participado en la serie dramática ´The Beast´.
Bailarín profesional desde muy joven, Patrick Wayne Swayze comenzó su carrera en el mundo del espectáculo en el teatro, donde participó en musicales como Grease.
Su primera oportunidad en el cine llegó cuando fue incluido en la película Rebeldes (1983). Entre 1987 y 1990 se convirtió en una estrella con el musical Dirty Dancing y con la película Ghost, en la cual interpretó a un joven trabajador de un banco que, tras ser asesinado, regresa como fantasma para despedirse de su novia y castigar a sus asesinos.
En los últimos meses, en paralelo a su enfermedad, Swayze había participado en la serie dramática The Beast.
En sus últimas entrevistas, el carismático actor había dicho que iba a pelear contra su enfermedad hasta el final. Fue en marzo del 2008 cuando se dio a conocer que Patrick Swayze tenía cáncer de páncreas, su delgadez provocó en varias ocasiones que diversos medios anunciaran su deceso en varias ocasiones.
Una y otra vez, Swayze tuvo que enviar comunicados desmintiendo las fatalidades y ofreció entrevistas en televisión para mostrar el positivismo que tenía frente a la enfermedad.
Aún enfermo de cáncer pancreático en fase 4, el actor no abandonó sus compromisos artísticos. Tan solo meses después del diagnóstico, Swayze se aventuró en una serie de detectives de la que él fue el protagonista, titulada The Beast.
Pero además de su arrojo en el trabajo, Swayze habló abiertamente con la prensa sobre este tipo de cáncer señalado como uno de los más mortales: solo uno de 10 pacientes sobreviven cinco años después del diagnóstico.
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