El jefe del INPE Julio Magán, afirmó que habrá una exhaustiva investigación para encontrar a los responsables de la fiesta realizada en un pabellón del penal de Lurigancho.
El jefe del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) Julio Magán, se pronunció sobre la fiesta con luces y venta de bebidas alcohólicas realizada en un pabellón del penal de Lurigancho, que fue denunciada por el dominical Panorama.
Indicó que tras tomar conocimiento del hecho ha realizado coordinaciones con el Ministro del Interior, José Luis Pérez Guadalupe y la Policía encargada de la seguridad interna y externa del penal para tomar cartas en el asunto y no dar ninguna "tregua a la corrupción".
"Definitivamente hay actos de corrupción. El trago que entra al penal no ingresa gratuitamente, hay un acto de corrupción", dijo a RPP Noticias.
Afirmó que se realizará una exhaustiva investigación para hallar a los responsables de este hecho que ha escandalizado a la opinión pública.
"Hay que realizar una exhaustiva investigación y a las personas que son responsables que se haga la denuncia penal respectiva y (...) que el poder judicial tome una decisión", manifestó.
Magán señaló que lo ocurrido no solo es un problema de la Policía y del INPE sino de todo el sistema de administración de justicia.
"No es un problema de la Policía o del INPE, si no es un problema de respuesta del Estado (...) y tenemos que responder integralmente todos", sostuvo.
Explicó, que si bien el INPE realiza labores de inspección y prevención en los penales, la capacidad operativa es superada por la cantidad de reclusos comparada con el personal que trabaja en los centros de reclusión.
"Lurigancho es un penal que tiene más de 9 mil internos, entonces tenemos un déficit de personal en materias de profesionales", precisó.
No obstante, indicó que continuarán trabajando en coordinación con la Policía para prevenir este tipo de actos irregulares, que, reiteró, tienen que ver con problemas de corrupción interna.
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