Una reportera le puso una zancadilla a un refugiado sirio que estaba huyendo de la policía con su hijo en brazos. El acto ha sido condenado en las redes sociales.
La más noble de las profesiones o el más vil de los oficios. Un video difundido en Twitterha desatado gran indignación ya que muestra a una periodista húngara ponerle una zancadilla a un refugiado sirio que escapaba de la policía llevando a su hijo en brazos. El hombre cayó al suelo, su hijo lloraba por el golpe y la mujer solo atinaba a grabarlos.
Decenas de periodistas europeos se han movilizado a las zonas fronterizas de Hungría para captar los padecimientos que afrontan miles de refugiados sirios que a diario tienen que escapar de la policía para evitar que los lleven a campos para refugiados. Sin embargo, la periodista Petra Laszlo de la cadena N1TV olvidó su papel de comunicadora para protagonizar una escena de odio y agresión.
Según se observa en las imágenes difundidas en Twitter por el periodista Stephan Richter, un refugiado sirio, con un niño en brazos, logra esquivar a la policía, pero una reportera le mete cabe y lo hace caer al suelo.
En principio quedaban algunas dudas si en verdad la periodista tuvo la intención de ponerle una zancadilla al refugiado, pero un segundo video propalado en la redes sociales la muestran agrediendo a hombres y niños que huían de la policía.
Tras el incidente, la cadena N1TV para la que trabaja Petra Laszlo publicó un comunicado a través de su página de Facebook en el que explican que la reportera ha sido despedida por considerar inaceptable lo ocurrido.
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