El presidente Evo Morales aclaró que el objetivo es luchar frontalmente contra el contrabando en las zonas limítrofes.
El grupo de élite F-10 de las Fuerzas Armadas fue movilizado hacia la frontera con Chile este miércoles por orden del gobierno de Bolivia. El presidente de ese país, Evo Morales, explicó que no es una acción de agresión o provocación sino parte de la lucha contra el contrabando.
"Hemos decidido reorganizar la lucha contra el contrabando. Hay un equipo de ministros que va trabajando. Eso no es ninguna agresión a Chile. Si es importante movilizar alguna de nuestras fuerzas va a ser contra el contrabando no contra el pueblo chileno, menos contra el Gobierno chileno", dijo en conferencia el mandatario boliviano.
La respuesta. Más temprano, el canciller de Chile, Heraldo Muñoz, calificó como una "acción delicada" la movilización de hombres del Ejército hacia sus fronteras. "No quisiéramos que esto escalara a algo peligroso", dijo.
Sin embargo, Morales explicó que los grupos especializados de la Policía y las Fuerzas Armadas tienen la misión de "defender la economía y a las empresas bolivianas perjudicadas por el contrabando sin límite".
Las razones. El gobierno del país altiplánico aseguró que el plan es copar como mínimo un kilómetro de distancia para evitar incidentes en una zona que, según consideraron, se mueve mercadería ilegal por al menos 34 millones de dólares.
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