El Pro Piacenza, un equipo de la Serie C, perdió a su plantilla profesional por problemas económicos y acudió a sus canteras para tratar de salvar la afiliación en un partido que terminó en goleada histórica.
El Pro Piacenza, un equipo de la Serie C del fútbol italiano, no podía faltar al partido de la fecha 27 que le tocaba jugar este domingo en calidad de visita ante el cuadro de Cuneo, en el Estadio Fratelli Paschiero de Piamonte. Si no se presentaba, luego de haber perdido por walkover las tres fechas anteriores, se hubiera resignado a ser expulsado, por reglamento, de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC)
Con ocho puntos en la tabla y una deuda de 600 mil dólares en pagos a sus empleados, el Pro Piacenza se había quedado sin técnico y plantilla profesional en las jornadas previas. Por eso, decidido a no perder la afiliación, el presidente del club, Maurizio Pannella, convenció a siete juveniles y a un masajista del club para viajar a Piamonte.
Los chicos, de las categorías 2000, 2001 y 2002, llegaron el mismo domingo y sobre la hora al Fratelli Paschiero. Uno de los juveniles, Nicolo Cirigliano, fue anunciado como técnico y jugador, pero cuando faltaba poco para entrar a la cancha, uno de los jugadores no pudo firmar la planilla porque había olvidado su documento. El reglamento de la FIFA exige como mínimo siete jugadores en el campo y a falta de uno, el masajista, de 38 años, se ofreció para completar el equipo.
El resultado fue, muy probablemente, la peor goleada del Pro Piacenza en sus cien años de historia. El Cuneo le marcó 20 goles. En el primer tiempo 16 y en el segundo, casi como en un acto de misericordia, solo cuatro. El masajista resistió hasta los 32 minutos del segundo tiempo, pero para ese momento el padre del juvenil que había olvidado el documento ya había conseguido traerlo. El Pro Piacenza nunca llegó con peligro al área contraria.
El encuentro entre el Pro Piacenza y el Cuneo ha indignado a los dirigentes italianos, quienes el próximo 11 de marzo decidirán el destino del club fundado en 1919 en la ciudad de Plasencia. Todo indica que el equipo, de todos modos, perderá la afiliación.
El presidente de la FIGC, Gabriele Gravina, dijo que "lo que sucedió en Cuneo con el equipo Pro Piacenza es un insulto al deporte y sus principios fundamentales. Por su parte, el presidente de la liga de fútbol profesional italiana (Lega Pro), Franceso Ghirelli, consideró que en el encuentro jugado este domingo en Piamonte se "han violado las reglas de lealtad deportiva de una manera sombría".
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