El secretario de Defensa de EE. UU., Pete Hegseth, defendió la efectividad de lo que llamó "la operación militar más compleja y secreta de la historia" de Estados Unidos, calificándola como "un éxito rotundo" que dio como resultado un acuerdo de alto el fuego.
El secretario de Defensa de EE.UU., Pete Hegseth, insistió este jueves en que los bombardeos estadounidenses sobre tres instalaciones iraníes "destruyeron sin duda" las capacidades nucleares de Teherán y afirmó que no tenía constancia de ningún informe que apunte a que el uranio enriquecido que podían guardar estos emplazamientos haya sido retirado antes de los ataques.
"No tengo constancia de ningún informe de inteligencia que haya revisado que diga que las cosas no estaban donde debían estar o que hayan sido movidas", se limitó a responder Hegseth preguntado en una rueda de prensa sobre la posibilidad de que el Gobierno iraní haya trasladado el material de sus instalaciones en Fordó, Natanz e Isfahán en anticipación al bombardeo estadounidense.
El propio presidente estadounidense, Donald Trump, ha insistido en días previos en el éxito de los bombardeos y en Teherán parece perdido el acceso a sus reservas de uranio enriquecido al 60 % tras el ataque.
Este mismo jueves, Trump volvió a hacerlo en un mensaje publicado en su red Truth Social, asegurando que Irán "no sacó nada de las instalaciones. ¡Tardaría demasiado, es demasiado peligroso y pesado y difícil de mover!".
Un airado Hegseth defendió la efectividad de lo que llamó "la operación militar más compleja y secreta de la historia" de Estados Unidos y cargó contra la prensa por amplificar un reporte preliminar de inteligencia que estimó que tras el ataque estadounidense el programa nuclear de Irán se vería demorado por unos seis meses, no años, como ha asegurado Trump.
El secretario de Defensa insistió en que la operación fue "un éxito rotundo, dando como resultado un acuerdo de alto el fuego" entre Teherán y el Gobierno israelí. "Ha habido mucha discusión sobre lo que sucedió y lo que no sucedió", advirtió.
"Oponerse a Trump porque quieren que no tenga éxito"
La encrespada rueda de prensa de Hegseth se produce después de que medios estadounidenses reportaran el miércoles que la Casa Blanca planea limitar el intercambio de información clasificada con el Congreso, luego de que la prensa socavara el bombardeo del fin de semana a raíz de un informe de inteligencia preliminar que se filtró a CNN o The New York Times.
Sobre las afirmaciones hechas este jueves por el líder supremo iraní, Ali Jameneí, de que los ataques estadounidenses a sus instalaciones nucleares no lograron "nada significativo", Hegseth dijo que Teherán "tendrá que decir muchas cosas para reforzar su imagen, sobre todo a nivel interno". Aseguró que en el Pentágono monitorean la información e insistió en que su trabajo es "estar preparados para actuar".
Con un tono antagonista ante lo que considera "noticias falsas", Hegseth citó "nueva información de fuentes y métodos históricamente confiables, muy diferentes de la evaluación preliminar de baja confianza, que dice que varias instalaciones nucleares iraníes clave fueron destruidas y tendrían que ser reconstruidas en el transcurso de los años".
"Me refiero concretamente a ustedes, la prensa, porque se oponen tan vehementemente a Trump. Parece estar en su ADN y en su sangre: oponerse a Trump porque quieren que no tenga éxito, tanto que incluso se oponen a la eficacia de estos ataques, tienen que esperar que tal vez no hayan sido efectivos", aseguró.
El jefe del Pentágono compareció en su segunda conferencia de prensa desde los ataques del fin de semana junto al jefe del Estado Mayor conjunto, Dan Caine, quien reveló nuevos detalles sobre la operación bautizada como 'Midnight Hammer' (Martillo de Medianoche), pero evitó ofrecer un juicio sobre el futuro del programa nuclear iraní para en su lugar insistir en que la evaluación está en manos de las agencias de inteligencia.
Tanto Trump como Hegseth y otros miembros de la Administración han criticado lo que ven como "intentos de minimizar la labor de los pilotos que participaron en la misión" que, según Washington, "aniquiló" las capacidades nucleares de Teherán.
Durante su participación en la cumbre de la OTAN, en La Haya, el mandatario estadounidense aseguró el miércoles, en referencia a Irán, que “lo último que quieren hacer ahora es enriquecer nada, quieren recuperarse” del ataque de su país tres instalaciones nucleares clave el fin de semana, aunque también advirtió de que Washington tampoco “lo va a permitir”.