En tanto, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, admitió que su ejército se encuentra en una situación "muy difícil" en la región rusa de Kursk.
El presidente ruso, Vladimir Putin, urgió el viernes a los soldados ucranianos que combaten en la región rusa de Kursk a que entreguen las armas, después de que Donald Trump le pidiera que "perdonara la vida" a los militares en el frente.
"Si entregan las armas y se rinden, se les garantizará la vida y un trato digno conforme a las normas del derecho internacional ya las leyes de la Federación de Rusia", afirmó Putin, según unas declaraciones televisadas.
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Zelenski admite que el ejército ucraniano está en una situación "muy difícil" en la región rusa de Kursk
Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, admitió este viernes que las tropas de Kiev están en una situación "muy difícil" en la región rusa de Kursk, aunque matizó que la operación en el país vecino rebajó la presión del ejército en otras zonas de Ucrania.
"La situación es obviamente muy difícil en la región de Kursk", afirmó Zelenski a los periodistas en Kiev, añadiendo que los combates se estabilizaron en la región de Donbás, en el este de Ucrania.
Como se recuerda, el mandatario ucraniano acusó recientemente a Putin de "sabotear la diplomacia" en la propuesta de Estados Unidos sobre una tregua en Ucrania, y ante la que el mandatario ruso ha mostrado sus reservas.
Putin "hace ahora todo lo que puede para sabotear la diplomacia poniendo condiciones extremadamente difíciles e inaceptables desde el principio, incluso antes de un alto al fuego", criticó Zelenski en la red X.
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