Katia Martínez, del Centro de Emergencia Mujer de Yauli, manifestó que la pena para los agresores que abusen de menores de 10 años es de cadena perpetua.
A comparación del año pasado, la agresión sexual a niños y niñas menores de 10 años se incrementó en un 130% en la provincia de Yauli, región Junín, informó Katia Martínez, encargada del Centro de Emergencia Mujer de dicha localidad.
Recordó que la pena para los agresores que abusen de menores de 10 años es de cadena perpetua; mientras para los que abusen de mayores de 18 años es de 25 a 35 años de cárcel.
Asimismo, consideró que la pena para los agresores debe ser más drástica sin beneficio penitenciario.
Finalmente, sostuvo que se requiere un trabajo conjunto entre padres, sociedad civil y autoridades a fin de disminuir los casos de abuso sexual a menores.
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