El ministro de Agricultura explicó lo que supondría la permanencia de Odebrecht en el proyecto de irrigación de Olmos.
El ministro de Agricultura, José Hernández explicó que la inhibición de la venta del proyecto de irrigación de Olmos, generará una pérdida de 430 millones de dólares anual debido a que la permanencia de Odebrecht, no asegura la operación óptima del proyecto.
Según explicó en Todo Se Sabe, cuando comenzó la etapa de operación y las tierras que habían sido concesionadas a Odebrecht fueron entregadas al sector privado, se hizo entrega también del derecho de una cuota de agua para irrigarlas. Sin embargo, con los problemas legales de la empresa brasileña el suministro de agua en estas hectáreas orientadas principalmente a la agroexportación, corre riesgo.
Venta frustrada y proyección. Según dijo, la venta del proyecto suponía la expulsión de Odebrecht y la transferencia de su participación a Brookfield Infraestructure Partners LP y Suez SA, por un monto no especificado. Además Hernández comentó que la totalidad de este dinero iría a un fideicomiso para para cualquier eventual reparación que tenga el Estado, producto de las investigaciones y procesos judiciales abiertos a Odebrecht.
El ministro comentó que el proyecto comprende 43.000 hectáreas, 38.000 para el sector privado y 5.000 para las comunidades de Olmos. “Cuando una hectárea no recibe agua no produce y por tanto se pierden 10.000 de dólares anuales. En total tenemos 43 hectáreas por lo que sin riego, enfrentamos una pérdida de 430 millones de dólares”.
Rol e interés del Estado. Hernández dijo que el proyecto no es manejado por el Ministerio de Agricultura ni por el Gobierno del presidente Pedro Pablo Kuczynski. Además aseguró que su única preocupación como titular de esa cartera, es el riesgo por el que corre la producción que está orientada al mercado externo.
El ministro explicó también que para que el Gobierno entre a operar en el proyecto de Olmos, tendría que negociar y reconocer las inversiones y todos los gastos que sean necesarios. Agregó que el interés del Gobierno fue asegurar la venta para que el proyecto opere plenamente, pero que la inhibición presentada por ampuero, frustró esta posibilidad.
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