Las autoridades españolas sospechan que se trata de un ajuste de cuentas y que el objetivo del ataque era el peruano, dueño del despacho.
Conmoción ha causado el triple asesinato ocurrido ayer en un despacho de Madrid regentado por un abogado peruano, un crimen que obedecería a una venganza o a un ajuste de cuentas.
Investigación. Los agentes, que hoy continúan tomando declaración a posibles testigos, sospechan que fueron varios los autores del crimen y que buscaban al propietario del bufete, identificado como Víctor Joel S.C., un abogado peruano que fue fiscal en su país, donde llevó causas de secuestros y tráfico de drogas.
El peruano. En Madrid se dedica a asuntos de extranjería en el popular barrio madrileño de Useras, donde reside una importante población de inmigrantes latinoamericanos y asiáticos.
Interrogatorio. El abogado ha sido interrogado por la Policía para tratar de esclarecer lo ocurrido, aunque él no estaba en la oficina cuando entraron los sicarios en la tarde del miércoles.
Los muertos. Allí encontraron a las víctimas identificadas como Pepe C.V., nacido en 1973 en Ecuador; María O.R., cubana de 46 años, a quien sus familiares y vecinos llaman Marisa; y Elisa C.G., también de origen latinoamericano.
Intentaron quemar el despacho. El primero era un cliente y fue hallado con un hachazo en la cabeza y parcialmente quemado en un incendio desatado en el lugar de los hechos.
Más detalles. La segunda repartía publicidad desde hace cuatro años en el despacho, era muy conocida en el barrio, según vecinos consultados por la agencia EFE, y la tercera trabajaba como secretaria. Una fue degollada, la otra tenía un golpe en la cabeza y ambas sufrían quemaduras.
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