La lucha entre un matrimonio del mismo sexo y un cocinero cristiano empezó en el 2012 cuando este último se negó a diseñarles un pastel para su boda.
Durante una hora, los nueve jueces que pertenecen al Tribunal Supremo de los Estados Unidos tuvieron que evaluar el caso del cocinero Jack Phillips quien en julio de 2012 se negó a diseñar un pastel para una pareja del mismo sexo que iba a contraer matrimonio. El repostero indicó que si aceptaba, iba en contra de sus creencias religiosas.
Luego de que les negara hacer la torta, la pareja Charlie Craig y David Mullins acudió a los tribunales e interpuso una demanda ante la Comisión de los Derecho Civiles de Colorado, que les dio la razón y cuyo fallo fue avalado por un tribunal del mismo estado.
Phillips argumentó este martes que el diseño de sus pasteles son una forma de expresión artística y que cocinar para parejas gays va en contra de su libertad de expresión, la cual está defendida por la Primera Enmienda de la Constitución. El Tribunal Supremo se encuentra ahora dividido entre cuatro jueces liberales y cinco conservadores.
Debate
Analistas consideraron que el veredicto final sobre el caso se llevará a cabo en junio de 2018 y será fruto de una votación ajustada en la que un solo juez dará el voto del desempate. Algunos de los jueces conservadores hablaron de la posibilidad de que los procedimientos contra Phillips hubieran estado impregnados de prejuicios.
La pareja gay que no pudo comprar su torta de bodas, Charlie Craig y David Mullins, estuvieron dentro de la sala del Tribunal Supremo donde se realizó la audiencia. A través de su abogado, defendieron la necesidad de que se apliquen las leyes que impiden la discriminación contra parejas del mismo sexo. (EFE).
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