La celebración de la música latina se dará en medio de un clima adverso por la elección de Donald Trump como presidente de EE.UU.
La gran fiesta de la música hispana aterriza de nuevo en Las Vegas este jueves con la 17 edición de los Grammy Latino, unos galardones en los que, con toda probabilidad, tendrá eco y se dejará notar la reciente victoria presidencial en EE.UU. del republicano Donald Trump.
El T-Mobile Arena de la ciudad del juego acogerá el jueves la ceremonia de entrega de los reconocimientos que otorga la Academia Latina de la Grabación, que este año presenta una competencia muy disputada.
El Grammy Latino a la mejor grabación se lo disputarán Pepe Aguilar (Cuestión de esperar), Pablo Alborán (Se puede amar), Andrea Bocelli (Me faltarás), Buika (Si volveré), Djavan (Vidas pra contar), Enrigue Iglesias ft. Wisin (Duele el corazón), Jesse & Joy (Ecos de amor), Laura Pausini (Lado derecho del corazón), Diego Torres (Iguales) y Carlos Vives & Shakira (La bicicleta).
A la mejor canción optarán John Finbury ft. Marcella Camargo (A chama verde), Manuel Medrano (Bajo el agua), Celso Fonseca (Céu), Enrique Iglesias ft. Wisin (Duele el corazón), Jesse & Joy (Ecos de amor), Sin Bandera (En ésta no), Kevin Johansen (Es como el día), Fito Páez & Moska (Hermanos), Carlos Vives & Shakira (La bicicleta) y Flavio Cianciarulo (La tormenta).
Por su parte, el Grammy Latino al mejor artista nuevo se decidirá entre Sophia Abrahão, Alex Anwandter, The Chamanas, Esteman, Joss Favela, Ile, Mon Laferte, Manuel Medrano, Morat e Ian Ramil.
Con Sebastián Rulli y Rosely Sánchez como anfitriones, la 17 edición de los Grammy Latino contará con un extenso plantel de artistas que actuarán en la ceremonia, entre los que figuran J Balvin, Banda Los Recoditos, Los Fabulosos Cadillacs, Laura Pausini, Prince Royce con Gerardo Ortiz, Diego Torres, Carlos Vives y Yandel.
Clima adverso para los latinos. Con semejante concentración de estrellas y personalidades latinas es previsible que gran parte de las conversaciones y mensajes en los Grammy Latino giren en torno al triunfo presidencial de Trump, que basó su campaña electoral en una muy agresiva y polémica retórica sobre los inmigrantes hispanos.
En este sentido, el presidente de la Academia Latina de la Grabación, Gabriel Abaroa, aseguró en una entrevista en septiembre que "no hay muro alguno que se pueda construir que detenga el poder de la música".
"Jamás. La música no la puedes amurallar", dijo en referencia a la polémica propuesta de Trump de levantar un muro en la frontera entre Estados Unidos y México.
EFE
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